El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, rechazó el pasado mes de mayo la ayuda de la Unión Europea, que repartió 1,5 millones de mascarillas a los estados miembros.
La Comisión Europea envió mascarillas a 17 estados miembros de la UE y al Reino Unido. Sin embargo, en la lista de reparto no se encontraba España, uno de los países más afectados por el coronavirus.
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Austria, Polonia, Malta, Chipre, Dinamarca, Suecia, Finlandia, Países Bajos, Francia, Italia, Croacia, Eslovenia, Grecia, Rumanía, Bulgaria, Eslovaquia, Hungría y Reino Unido se beneficiaron de estas mascarillas.
Sin embargo, Pedro Sánchez se desentendió de la ayuda a pesar de que en España había serias dudas sobre el 'stock' de mascarillas en un momento crítico de la pandemia, según El Mundo.
Aunque los casos estaban descendiendo progresivamente, el riesgo de rebrote seguía presente y no había certeza de que los establecimientos pudiesen seguir vendiendo mascarillas.
Esta compra de mascarillas financiada por la Comisión a través del Instrumento de Apoyo de Emergencia tenía como objetivo el dar apoyo directo a los Estados miembros en la mitigación de las consecuencias inmediatas de la pandemia de coronavirus.
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Pedro Sánchez pidió ayuda
A Pedro Sánchez no le interesaron las mascarillas que se empezaron a repartir el pasado mes de mayo pero si recurrió a la Unión Europea para pedir dinero debido a la crisis económica en España.
El presidente del Gobierno llegó a un acuerdo con la Unión Europea para recibir 140.000 millones de euros entre subvenciones y préstamos en los próximos años para la recuperación económica.
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A pesar de que el líder socialista ignoró a Europa con el asunto de las mascarillas, fue el primero en solicitar dinero cuando se aprobó el fondo anticrisis de 750.000 millones de euros.
Eso si, para recibir este dinero, la Unión Europea ha exigido al presidente del Gobierno español que cumpla una serie de condiciones que garanticen la estabilidad económica del país.