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Un hombre con expresión de enojo aparece en primer plano, mientras que en un recuadro circular se muestra a otro hombre con una expresión seria; en la parte inferior de la imagen se puede leer el texto "¡RONCERO ESTALLA!" y en la esquina superior izquierda se encuentra el hashtag #ChiringuitoMadrid.
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Tomás Roncero, a por Jota Jordi, le dice la verdad a la cara: “Por ahí no…”

La pasada madrugada en 'El Chiringuito de Jugones', se vivió un momento de gran tensión entre los tertulianos

Todo comenzó cuando Jota Jordi criticó el arbitraje del partido entre el Real Madrid y el Espanyol, destacando una jugada en la que se pitó un penalti a favor de Endrick. Esta situación fue el detonante que hizo que Roncero perdiera la paciencia.

La respuesta de Roncero a Jota Jordi

Visiblemente molesto, Roncero expresó su frustración ante las críticas de su compañero, diciendo: "Estamos debatiendo cuando el árbitro acierta y pasamos del 3 a 1 al 4 a 1, estoy hasta el gorro". Además, añadió que los madridistas están llegando al límite de su paciencia: "Nos estamos callando, pero tenemos un aguante. Tenemos que soportar que, incluso cuando el Madrid gana 4 a 1 con decisiones arbitrales correctas, se ponga en duda la victoria".

Roncero también mencionó un penalti no señalado que, según él, fue uno de los más claros de la temporada, y criticó que se cuestione la victoria del Real Madrid: "Nos toca aguantar que se diga que la victoria contra el Espanyol está bajo sospecha".

Una polémica sin fundamento

Según la opinión general de los tertulianos, no existía motivo para la polémica sobre el penalti en el Bernabéu, ya que la falta sobre Endrick  fue evidente y el árbitro, siguiendo el reglamento, actuó correctamente. Lo que sí generó debate fueron las tarjetas amarillas que el árbitro Munuera Montero mostró a varios jugadores del Real Madrid, pero curiosamente, Jota Jordi no hizo mención a este tema en su intervención.

Un patrón repetido

Tomás Roncero también aprovechó la ocasión para criticar a personas como Jota Jordi, a quienes acusó de inventar polémicas sin fundamento con el único propósito de atacar y desestabilizar al Real Madrid. Según Roncero, este tipo de comentarios son parte de una estrategia recurrente que busca minar la credibilidad del equipo blanco, incluso en partidos donde las decisiones arbitrales son correctas y la victoria es contundente.

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