Están arruinados, pero 2 jugadores del Barça cobran más que Mbappé: ver para creer
La crisis del Barcelona no les ha impedido dar salarios millonarios a dos de sus jugadores
Ser uno de los mejores jugadores del mundo y estar en el equipo más importante del planeta es la receta perfecta para el éxito, pero también para un salario importante que es justamente lo que disfruta Kylian Mbappé con los 31,3 millones de euros que gana con el Real Madrid.
No obstante, esta cantidad palidece de manera sorprendente contra los salarios que tienen Frenkie de Jong y Robert Lewandowski, quienes reciben 37,5 millones y 33,5 millones por temporada respectivamente, siendo los jugadores mejor pagados de La Liga a pesar de la crisis culé.
Cuentas que no cuadran
El Barcelona se ha pasado las últimas temporadas quejándose de la grave crisis financiera que les ha impedido poder formar un equipo competitivo, justificando la falta de fichajes importantes con el poco capital que tienen para poder realizar cambios significativos en la plantilla.
Sin embargo, los millonarios salarios con los que cuentan De Jong y Lewandowski demuestran todo lo contrario, donde realmente no cuadra el constante discurso culé sobre la falta de capital cuando tienen a los dos jugadores mejor pagados de toda La Liga.
Si bien el salario de Mbappé en el Real Madrid se justifica con su calidad y por ser una estrella de clase mundial, no puede decirse lo mismo de los jugadores culés, quienes son acompañados por un Ilkay Gundogan que recibe 16,6 millones por año, dejando aún más en evidencia al Barcelona.
La gran mentira culé
Con esto queda demostrado que el Barcelona realmente no está sufriendo ninguna crisis, con su discurso siendo una mera excusa para ocultar su mediocridad, siendo un equipo que, para sorpresa de nadie, prefiere gastarse todo su capital en el suelo de jugadores acabados.
La mentira se ha revelado y ahora el Barcelona no tendrá ningún hueco donde pueda ocultarse, con los nules fichajes que han logrado durante este mercado siendo el resultado de la terrible gestión de Laporta en vez de la comprobada como inexistente crisis financiera.
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