El expresidente de la Generalitar de Cataluña Carles Puigdemont tendrá que declarar ante el tribunal de primera instancia de Bruselas el próximo 3 de febrero.
Está previsto que ese día se tome una decisión sobre las euroórdenes dictadas por el juez instructor Pablo Llarena contra él y y los ex consellers Toni Comín y Lluís Puig. (Puigdemont intentó 'fichar' al Papa Francisco para su causa separatista)
Ese mismo día, el 3 de febrero de 2020, el DNI español del expresidente de la Generalitat dejará de estar en vigor y no tiene intención de regresar para renovarlo.
Esta circunstancia complica la situación de Puigdemont en el extranjero ya que, a partir de la citada fecha, pasaría a ser un "indocumentado sin papeles".
La única baza que le quedaría es la del pasaporte pero, para desgracia de Carles Puigdemont, también está a punto de caducar. Será en un año o año y medio, según ha afirmado él mismo en una entrevista.
Asimismo, Puigdemont no tiene en mente desplazarse a España o pasarse por el consulado español para renovar el DNI por el riesgo de una posible detención. (¿¡Puigdemont detenido!? La imagen más esperada puede estar a punto de producirse)
Orden de detención y traslado a España
El próximo 3 de febrero el juez belga, que ya tendrá conocimiento sobre la resolución del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) sobre la inmunidad del ex vicepresidente de la Generalitat Oriol Junqueras, responderá a la orden de extradición emitida por el magistrado instructor Llarena.
Si se acepta la orden de extradición, las autoridades trasladarían a Puigdemont a España para que se enfrente a la justicia como han hecho otros líderes independentistas en estos últimos meses.