Francisco Cotes tenía 17 años cuando conoció a Isabel Pantoja. Ella tenía 14. Camarero mallorquín, fue el primer amor de la tonadillera pero el interés de la madre porque encontrara un marido de buena posición acabó con su relación.
'Socialité' contactó con el primer novio de Isabel Pantoja, que ha narrado cómo la familia de la cantante ha sido clave para que se haya convertido en lo que es ahora, tanto en lo bueno como en lo malo. Ambas cosas van unidas en este caso: sin maldad, quizá Isabel no habría llegado a ser una de las cantantes más reconocidas del mundo.
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"¿Obsesionada con el dinero? Es que todo viene a raíz de su alrededor, de la familia. Ella ha sido la que ha mantenido, ha sacado para adelante a toda su familia. Con 14 años ella sacó a Bernardo, a Agustín, a Juanito y a su padre y a su madre. Y claro, su madre no la dejaba ni a sol ni a sombra. Doña Ana no cobraba ni una pensión porque jamás había cotizado. Bernardo no daba palo al agua, porque a Bernardo le busqué yo un trabajo aquí cerca de donde ella actuaba y duró nada y menos. Esa gente no era de trabajar", cuenta.
"Ha cambiado muchísimo, muchísimo. No acepto que sea tan egoísta y sobre todo lo que le ha hecho al hijo. Yo estoy seguro de que todo esto viene por parte de los hermanos, sobre todo Agustinito. El Agustinito ese ya apuntaba maneras cuando estaba aquí. Desde pequeña la han explotado hasta tal punto que ella misma se ha vuelto poco a poco así de egoísta. Si hubiera estado conmigo esto no le habría pasado", asegura el primer novio de la Pantoja.
¿Cómo fue su relación?
Francisco Cotes cuenta que cuando conoció a Isabel Pantoja fue en los 70, cuando con 14 años la tonadillera actuaba en el tablao flamenco Los Rombos de Mallorca: "Ella tenía 14 años y yo tenía 17 y ya apuntaba maneras".
En aquella época, Isabel Pantoja aún no era conocida y su famiia tenía dificultades económicas: "Cuando vino tenía una mano delante y otra detrás, le tuvieron que prestar hasta el traje para actuar. Yo estaba con el tiempo enamoradito de ella. Cuando me atreví a pedirle que fuéramos novios le escribí una carta a su madre porque no me atrevía a decírselo en persona", expresó.
"La madre de Isabel Pantoja es la que siempre ha movido los hilos"
Su madre precisamente no parecía demasiado interesada en que profundizaran en su relación: "Nos sentábamos su madre en medio, ella a un lado y yo al otro. Entonces, si se le puede llamar a eso juntos... O cuando salíamos a tomar algo, que siempre íbamos con alguien acompañados".
Tras el paso de Isabel por Mallorca, la relación se enfrió a pesar de que Francisco llegó a acudir a Sevilla para verla: "Yo tuve que vender un armario y una serie de cosas para poder ir a Sevilla. Después de venir de Sevilla y de estar con ellos unos días, aunque estuviéramos casi un año escribiéndonos, la cosa se fue enfriando. Ya estaba prosperando mucho y poco a poco la cosa fue decayendo. Yo era un camarero, pienso que muy poca cosita para ella. Ella siempre ha querido más y más", concluye.