El presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, comunicó hace unas semanas que no habría grandes fichajes este verano debido a la crisis económica provocada por el coronavirus.
Ahora, ESPN ha añadido que Florentino Pérez no está dispuesto a hacer ningún fichaje hasta que Gareth Bale, extremo galés del Real Madrid, no se marche del equipo dirigido por Zinedine Zidane. (Por fin alguien ha llamado a las cosas por su nombre en el escándalo Gareth Bale)
Bale tiene una ficha muy alta y el máximo dirigente blanco quiere desprenderse de él cuanto antes. De lo contrario, Zidane tendrá que conformarse con la plantilla que tiene actualmente.
ESPN ha hablado con fuentes cercanas a la directiva blanca que han reconocido que la venta de Gareth Bale se antoja complicada ya que el '11' madridista quiere que el club que le fiche le pague el mismo sueldo. (Florentino se lleva un chasco con Gareth Bale: Estas son sus condiciones para irse)
A día de hoy, pocos equipos están dispuestos a ofrecerle un salario de tales dimensiones por lo que se quedará una temporada más en el Real Madrid si no rebaja sus pretensiones.
Por el momento, hay equipos como el Tottenham o el Borussia Dortmund que están interesados en Bale pero el internacional galés tendría que rebajarse el sueldo si quiere jugar en alguno de los dos clubes. (El Real Madrid intentó colar a Bale y a James cuando el poderoso PSG preguntó por una de sus estrellas)
17-18 millones por temporada
Lo que más preocupa al Real Madrid es que Gareth Bale valora más los 17-18 millones de euros que cobra por temporada que tener minutos y ser importante en un equipo grande.
Es decir, están dispuestos a facilitarle la salida si llega una buena oferta pero Bale solo quiere que le paguen la cantidad citada anteriormente. Jugar o no le da igual.
De hecho, Zidane ya le ha comunicado que no cuenta con él para la próxima temporada y que, si decide quedarse en Madrid, se pasará todo el año sentado en el banquillo o la grada.
A pesar de todo, Bale está feliz en la capital de España y no le importa ver los partidos desde fuera del terreno de juego mientras el club le pague lo que figura en su nómina.