En las oficinas de Valdebebas están muy pendientes a todo tipo de oportunidades que ofrece el mercado de fichajes. En el Real Madrid tienen claro que los dos galácticos a fichar son Kylian Mbappé y Erling Haaland. Los dos mayores talentos del fútbol mundial, los de mayor irrupción, y por los que podría tener garantizada una nueva era dorada.
Ambos futbolistas son las 'creme de la creme' del fútbol mundial y Florentino Pérez peleará por ficharlos a los dos y juntarlos, a su vez, en el nuevo Bernabéu. Un faraónico proyecto que reventaría Europa y con el que Florentino Pérez podría rodar su nueva etapa de fútbol en La Castellana.
El fichaje de Mbappé parece ser cuestión de dos: salida al Real Madrid o renovación con el PSG. El de Haaland, por su parte, sí que es más complejo y es más perseguido por otros grandes clubes del viejo continente. Uno de los más señalados y destacados es el Manchester City. Allí jugó su padre, Alf-Inge y allí quiere que juegue su hijo, en el Eithad Stadium.
Por dinero no será... En Manchester tienen el dinero por castigo, con Mansour bin Zayed Al Nahayan, y le pueden ofrecer a Haaland una cárcel de oro. Raiola, buen amigo del dinero, también podría apretar para sacar una mayor tajada de un fichaje que romperá todos los moldes del mercado de fichajes.
Y si Haaland se va al City... hay plan B. Una de las alternativas más baratas y que bien podrían cuadrarle al Real Madrid es la de Ferran Torres. El ex del Valencia, ahora con Guardiola en el City, podría salir del Etihad en el efecto rebote de Haaland. Fichar al noruego le quitaría espacio y su salida podría ser una realidad.
Un fichaje que está en la agenda del Real Madrid por esa españolización de la que venimos hablando en Don Diario y que firmaría un traspaso asequible. Siempre fue imposible sacarlo de Mestalla, pero si sale del City sí que podría tener opción de recalar en el próximo equipo madridista.
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Cuatro veces en la agenda
Tuvo el interés de los blancos hasta en cuatro ocasiones. El Real Madrid se interesó en su fichaje cuando apenas tenía 10 años y luego, dos años después, con 12 años ya no pudieron sacarlo de Paterna. El interés sobresalió, nuevamente, tras el Mundial sub-17. Allí brilló y Florentino quiso pagar 8 millones al Valencia para pagar la cláusula. En una traición desconocida por el público, desde Mestalla, rechazaron la oferta ya pactada.
El último intento lo frenó la pandemia. El club che necesitaba vender a sus máximos activos y terminó fichando por el Manchester City. El Madrid no quiso igualar la oferta que llegó por él y se fue a Inglaterra en una aventura que sigue y perdura tras varias temporadas en la Premier League.
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