El apellido ya prometía resultados: y desde luego, Carlos Sainz Jr. no ha fallado a las expectativas de los que le siguen desde sus primeros pasos al volante.
Ahora, con 26 años y más de 100 grandes premios de experiencia, el madrileño cumple uno de sus grande sueños de niño: formar parte de la escuderia Ferrari en la Fórmula 1.
A pesar de que su mejor resultado haya sido el podio en Brasil la pasada temporada, su destreza y fiabilidad al volante llevan destacando en el mundo de los monoplaza desde 2015, atrayendo a la popular marca italiana tras la marcha de Sebastian Vettel, el que hasta ahora ha sido el campeón de la escudería.
"Estoy muy contento de poder anunciar que correré para Scuderia Ferrari en 2021 y del futuro que me espera en el equipo" ha anunciado el piloto en sus redes sociales.
El joven Charles Leclerc será su compañero de equipo en Ferrari que, pese a no ser el jefe de filas, si tendrá posibilidades de luchar por el campeonato.
El madrileño será sustituido en McLaren por Daniel Ricciardo, el otro aspirante al volante de la escudería italiana.
El sueldo, un punto clave para Ferrari
Si bien Ferrari lleva tiempo vigilando los buenos pasos de Sainz en el circuito, no es su recorrido profesional, no es únicamente ésta la razón de la alegría que ha demostrado la escudería al contar con Sainz a partir de 2021.
También la gran diferencia de aspiraciones económicas entre Vettel y Sainz se ha convertido en un pilar fundamental de la nueva relación entre el piloto y la escudería.
Y es que el alemán tenía un sueldo, según las informaciones de Marca, de 39,3 millones de euros dentro de la escudería italiana; una cifra muy superior a la del español, que en McLaren recibía 3,4 millones de sueldo.
El cambio de escudería supondrá para Sainz un aumento considerable de salario, pero no superará los 20 millones de euros.