Gareth Bale retó al mundo, tras la Eurocopa, al anunciar un paso de su futuro, de alto impacto, y que levantaría muchos comentarios.
Su Gales quedó eliminada, a las primeras de cambio, pero el de Cardiff no argumentó nada y lo dejó todo como estaba.
Algunas filtraciones apuntaban a un retorno al Real Madrid para cumplir contrato, hasta el 30 de junio del 2022, y a posteriori una retirada para volver a jugar, en el Mundial de Qatar 2022, y colgar allí las botas con su país.
Esa rocambolesca situación la ha descartado, por completo, el mismísimo jugador y gente cercana a él. No piensa en su retirada, todavía, a pesar de que ya tiene 32 años y se acerca peligrosamente a dicho momento.
En el Real Madrid tienen claro que Bale está "motivado" y que su sonrisa en los entrenamientos permite confiar en una reválida tras los problemas vividos con Zinedine Zidane.
En los primeros partidos del curso, Bale ya ha mostrado ambición e incluso ha girado la opinión de los que pedían una retirada... por una renovación.
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Ancelotti apuesta por él
El Real Madrid no fichó a Mbappé y ahora confía en Gareth Bale. El Expresso de Cardiff podría incluso a renovar si termina haciendo una gran temporada y si Ancelotti lo pide.
En la directiva son conscientes de que Bale es una apuesta personal de Ancelotti y contentarán al técnico si hay resultados y si el propio italiano termina pidiendo su renovación. Hay caso Bale (y para rato).
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