El Real Madrid estuvo interesado en Mbappé y fue un secreto a voces, totalmente, mientras que se daban otros movimientos.
El PSG buscó fichajes sorpresas, hasta el final de mercado, y uno de ellos fue el de la incorporación de un lateral izquierdo con proyección.
Firmaron a Achraf Hakimi por 70 millones de euros y el marroquí no fue la única incorporación a la plantilla. Posteriormente, antes del cierre, firmaron a Nuno Mendes.
Un fichaje sorpresa, revelación, que se ha colado en la lista de media Europa, a última hora, mientras se esperaban incorporaciones de alto calibre.
Nuno llegó el último, pero la idea de los parisinos pasaba por algo realmente distinto: fichar a Miguel Gutiérrez, una de las grandes joyas de La Fábrica.
Quisieron hacerlo, a traición, esperando que el canterano agotase su contrato y dejando claras las intenciones desde Francia.
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Miguel rechazó la tentativa
El clausulazo no llegó a ningún lado por la propia voluntad que tenía Miguel en seguir vistiendo la elástica blanca.
Una vez asumieron el ridículo fueron a cerrar la contratación de Nuno Mendes y terminaron con ese fichaje.
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