Eurovisión, el camino del independentismo y TV3 para engañar a Europa

La manipulación de los medios públicos catalanes financiados por el separatismo quiere traspasar fronteras.

21 de Octubre de 2018
Eurovisión, el camino del independentismo y TV3 para engañar a Europa
Eurovisión, el camino del independentismo y TV3 para engañar a Europa

La manipulación, el adoctrinamiento y el engaño son conceptos que conoce a la perfección el independentismo catalán y que quieren trasladar desde Cataluña hasta toda Europa. Qué mejor manera de hacerlo que conseguir un altavoz potente como puede ser el Festival de Eurovisión. Desde hace años, TV3 intenta colarse en este festival accediendo a la UER (Unión Europea de Radiodifusión) sin éxito.

Formar parte de la Unión Europea de Radiodifusión, el ente responsable del Festival de Eurovision y que aglutina a las corporaciones públicas audiovisuales de los países europeos, es el sueño de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA) desde que se creó. TV3 y Catalunya Radio ha intentado entrar en este organismo mediante varias vías, pero nunca lo ha conseguido.

El nacionalismo catalán culpa a España, como no podía ser de otra forma, por no haber tenido acceso a la UER a pesar de estar intentándolo desde el año 1983. Sin embargo, no es verdad que RTVE haya tenido el mayor peso en esta decisión. Ha sido la propia organización y los entes televisivos de los países europeos los que han considerado que Cataluña no debía tener a su televisión pública en esta red.

Los artículos 3.3 y 3.4. y los anexos 2 y 5 de los criterios de admisión a la UER sirven a la CCMA para alegar que cumple con los requisitos: ser una corporación pública audiovisual europea de un país que es miembro de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) y tiene carácter nacional porque representa y ofrece cobertura plena a una comunidad política y cultural concreta de un Estado plurilingüistico. La realidad es que no cumple con ellos: no es un país en los términos que exige la UER, en especial porque una mayoría del pueblo catalán se ve representado por RTVE. No hay una mayoría política ni social, del mismo modo que no la hay en cuanto a la independencia catalana.

Cataluña intentó asociarse con los países del Este para ‘colarse’ en Eurovisión

El independentismo catalán se ha visto siempre reflejado, a pesar de las evidentes diferencias políticas y sociales, en los Balcanes. Y del mismo modo que se apoyó en Eslovenia para informarse sobre la posible creación del Banco Catalán en caso de declarar la independencia, intentó acceder a la UER enrolándose en la OIRT (Organización Internacional de Radio y Televisión), de la que formaban parte las repúblicas soviéticas. En 1988 lo lograron con Catalunya Radio, pero la fusión de la OIRT con la UER dejó fuera a la emisora catalana.

Este organismo ha rechazado en numerosas ocasiones, por razones evidentes, la adhesión de Cataluña. Pero desde el independentismo catalán se empeñan en hacer ver que RTVE y el Estado español son los responsables de su fracaso. La última vez que lo intentaron fue el pasado año 2017 durante la Asamblea General de la UER en Dublín. Esta petición está por ahora sin resolución, pero se espera una respuesta antes de finales de este año. En la CCMA son conscientes de que el ‘no’ es lo más probable.

Las posibles estrategias de TV3 para entrar en la UER

Y por este motivo ya planean una estrategia: seguir los pasos que han seguido otras regiones como Kosovo, Palestina, Escocia, las Islas Feroe o Gibraltar. Con todos los respetos, no creemos que sean el tipo de país que se merecen los catalanes de bien... Respectivamente, estas estrategias son presionar a la UER, esperar el reconocimiento de Cataluña como Estado (algo que no va a suceder), constituir una red de televisiones públicas regionales de España interesadas en adherirse a la UER, establecer un diálogo con RTVE o agotar los mecanismos internos para abrirse hueco en el organismo continental.

El independentismo considera que entrar en la UER y participar en Eurovisión es una oportunidad para promocionar, consolidar y expandir la lengua catalana, la cultura, la identidad y potenciar la imagen internacional de Cataluña. Es decir, una forma de engañar a Europa y tratar de demostrar que un porcentaje menor de la población forma un país, cuando Cataluña realmente tiene una mayoría unionista y por tanto una identidad mayoritariamente española. ¡No aprenderán nunca!