Los líderes del 'procés' condenados por el Tribunal Supremo han tardado cuatro meses en salir de la cárcel tras la aplicación del artículo 100.2 del Reglamento Penitenciario por parte de la Generalitat de Cataluña.
El 100.2 permite, en la práctica, otorgar a los presos clasificados en segundo grado beneficios muy similares a los de los presos clasificados en tercer grado. (Españoles y catalanes no se ponen de acuerdo respecto al indulto a los presos)
Según El Español, la Generalitat ha convertido este artículo en algo habitual para los líderes independentistas y funcionarios de prisión han calificado estos 'gestos' como "flagrantes fraudes de ley".
Carme Forcadell, Dolors Bassa, Jordi Cuixart, Joaquim Forn y Jordi Sánchez ya han obtenido permiso para salir de la cárcel entre semana para hacer voluntariados o trabajar.
Se espera que Raül Romeva, Jordi Turull y Josep Rull sean los siguientes en obtener los permisos para abandonar el centro penitenciario. Según la citada fuente podrían salir de la cárcel esta misma semana. El único que quedaría sin el beneficio del artículo 100.2 sería Junqueras.
De esta forma, la Generalitat está cumpliendo con sus promesas de sacar, en un corto periodo de tiempo, a los presos independentistas de la cárcel. (¡¡Los presos estarán en Cataluña la semana que viene!!)
Sin precedentes en condenas por sedición
Los líderes separatistas catalanes son los primeros ciudadanos españoles condenados por el delito de sedición en cuarenta años de democracia pero se pueden comparar con los golpistas del 23-F. Además, Oriol Junqueras, Raül Romeva, Jordi Turull y Dolors Bassa fueron condenados también por malversación de fondos.
Antonio Tejero tardó 10 años en conseguir el tercer grado. Jaime Milans del Bosch consiguió la libertad condicional en 1990, siete años después de entrar en prisión mientras que Alfonso Armada fue indultado por el PSOE en 1988 por su mal estado de salud.