En concreto existen 3 hechos específicos en los que la nieve pilló de imprevisto a los ciudadanos
Durante el invierno con las bajas temperaturas es normal ver algún que otro paisaje blanco a lo largo tanto del territorio español como de los diferentes países del mundo.
Pero lo cierto es que existen varias nevadas que se han dado fuera del periodo invernal o en algún lugar de clima cálido que han dejado boquiabiertos a más de uno.
1. Nevada en verano
Esta sucedió en la localidad española de Bronchales, Teruel, en el año 1932.
Y es que la nieve interrumpió en pleno mes de julio al municipo y fue tal el espesor que consiguió que se llegó a cubrir el Maestrazgo, los Montes Universales, la Sierra de Gredos y la Serranía de Cuenca.
Además, la nieve consiguió llegar hasta la Sierra de Albarracín en una altitud de 1.400 y 1.500 metros de altura.
2. Nevada en el Sáhara
Se trata de uno de los sitios más cálidos en los que menos puedes esperar que una nevada llegue.
Y es que en el desierto del Sáhara, que guarda temperaturas de hasta unos 60ºC, llegó a nevar en 3 ocasiones.
En estas, las dunas se cubrieron de una fina capa blanca que dejaron una preciosa estampa de colores en la que el tono cobrizo de la arena contrastaba con el blanco.
3. Nevada roja
Se trata de uno de los mayores espectáculos atmosféricos de la historia.
Y es que este es un proceso en el que la nieve absorve el color rojo cuando existe la presencia de un alga microscópica llamada Chlamydomona nivalis.
Esta se encuentra en los campos de nieve de los Alpes y en las regiones polares de todo el mundo inactiva y únicamente cuando las temperaturas aumentan libera células y extiende sus esporas rojas.
De esta forma, se produce un fenómeno visual increíble en el que la nieve adquiere un tono rojizo.