En el último programa de ‘Viva la vida’, todos los colaboradores analizaron las últimas declaraciones de Tamara Gorro tras publicar su vida personal en su nuevo libro, ‘Cuando el corazón llora’ y Terelu Campos aprovechó para contar sobre una situación que ella vivió cuando tenía 18 años, que eso le causó tener problemas de salud mental.
La colaboradora se abrió por primera vez ante los espectadores al confesar que acudió durante algo más de un año a un psiquiatra y su hija, Alejandra Rubio, se quedó de piedra ante esa circunstancia que contó su madre porque asegura desconocer esta información sobre ella.
Terelu ha contado que, en aquel momento, no tenía ganas de salir de casa y que vivió unos meses muy duros: "Parece que son tonterías, pero no lo son, son cosas que condicionan tu vida, tu salud". "Yo me metía en la cama y pensaba que me moría, que me iba a morir", añadió Terelu Campos.
La propia colaborada manifestó que estuvo más de un año en tratamiento junto a una eminencia en psiquiatría, Antonio Colodrón, fallecido en 2018.
Tras escuchar a su madre, Alejandra Rubio aseguró que no sabía nada al respecto: "Yo no sabía nada, no me lo ha contado nunca. No sé cómo reaccionar, son cosas como muy privadas que igual... esas cosas no me gusta hablarlas en público porque hay gente que no lo entiende".
Además, Alejandra declaró que “gracias a Dios no ha pasado por eso nunca y espero no pasar”, enseguida su madre aprovechó para decirle que espera que jamás viva algo así.
Asimismo, ha subrayado la importancia de que se trate con total normalidad estos asuntos en televisión. “Creo que cada vez es más necesario hablar de estas cosas en público”, ha insistido cuando su hija ha afirmado que a ella le gusta tratar estas cuestiones en privado.
Estas declaraciones se han producido cuando en el programa han hablado de Tamara Gorro. La ‘influencer’ está intentando salir de una fuerte depresión. Un duro momento del que está haciendo partícipes a sus fieles seguidores de las redes sociales. Durante la presentación de su nuevo libro aseguró que sufrió abusos sexuales en su infancia cuando acudió a un campamento de verano.