La Generalitat de Cataluña sigue poniendo trabajas al Ejército durante esta crisis del coronavirus. Su último 'feo' ha sido paralizar el hospital de campaña que estaba montando la Unidad Militar de Emergencias (UME) en Sabadell.
Dos son las personas que han liderado esta serie de trabas que han provocado que se ponga en pausa la puesta en marcha del hospital para atender a pacientes de coronavirus. (¡No tienen vergüenza ni perdón!: Torra se carga un hospital que montaba el Ejército)
Uno es Adrià Comella, director del Servicio Catalán de Sanidad (CatSalut), la gran aseguradora pública catalana que depende de la Consejería de Salud.
La segunda es la subalterna de Comella, la doctora Anna Aran Solé, jefa del CatSalut en la región Metropolitana norte de Barcelona. Ella es la que más trabas ha puesto.
En CatSalut no ha gustado nada que efectivos del Ejército se hayan desplazado hasta Sabadell para poner en funcionamiento un hospital de campaña en las pistas de atletismo de la ciudad.
A la hora de dar respuestas, todos se han remitido a las declaraciones de la titular del departamento, Alba Vergés, que ha explicado que no se está avanzando por cuestiones técnicas.
Según El Español, fuentes sindicales han asegurado que Anna Aran es una médico de familia independentista. "Es independentista y muy cercana a ERC, claro. Como todos los gerentes territoriales del CatSalut. Médico de familia de formación, fue directora de Atención Primaria en la ciudad. Tras ello ascendió a directora de centro en el Hospital Arnau de Vilanova.. De trato personal cercano y amable, destaca por ser testaruda y corporativista. Esto último es algo muy frecuente en la profesión médica",
En esta línea, han añadido que es una persona con la que se puede hablar pero es un hueso duro de roer negociando. "Se puede hablar con ella, pero es muy dura negociando". (¡Un hospital catalán prohíbe la entrada al Ejército!)
El Hospital Parc Taulí, saturado
La decisión de levantar un hospital de campaña en Sabadell se debe a la saturación del Hospital Parc Taulí, en el que ya han fallecido varias personas por coronavirus en los últimos días.
Por ello, efectivos del Ejército estaban ayudando a poner en funcionamiento cuanto antes un hospital en el que se podrían atender a cerca de 300 personas.