Este pasado 30 de julio, el Ayuntamiento de Alicante celebraba la sesión plenaria de rigor, para poner al día y debatir asuntos de importancia regional.
Un encuentro en el que la seriedad y el rigor deben presidir los debates y las propuestas... o eso es lo que podrían esperar los ciudadanos de Alicante de sus representantes políticos. (Urkullu aplaude con las orejas: El chantaje a Sánchez le ha funcionado)
Sin embargo, Vanessa Romero, de Unidas Podemos, interrumpía el pleno con una queja inesperada.
"No sé por allí, pero por esta zona estamos congeladas de frío" aseguraba la de la formación morada "Esto también se llama micromachismo".
Unas palabras que dejaban asombrados a todos los presentes, incluido el alcalde popular Luis Barcalá, que no daba crédito a lo que estaba escuchando: "Perdón, es que no he entendido lo que ha dicho" confesaba el alcalde.
El alcalde 'calienta' las orejas a la podemita
"Que estemos pasando frío nosotras ahora mismo es un micromachismo" seguía asegurando la podemita.
Barcalá, tan asombrado ante la situación como el resto de los presentes, no podía creerse la interrupción del pleno por el aire acondicionado: "Supongo que sencillamente es una broma, ¿no?". (¿Pedro Sánchez, presidente de la III República?)
Palabras que enfadaban aún más a Vanessa Romero, que procedía a explicar el machismo del aire acondicionado: "El estándar de los 24 a 27 grados de confort fue establecido en los años sesenta y se tomó como referencia a un varón de unos 40 años y 70 kilos de peso [...] El de las mujeres suele ser tres grados por encima".
Un discurso que el alcalde popular prefirió mantener como anecdótico: "Entonces reprenderé con dureza a los conserjes. ¿Le parece bien eso?".
No contenta con ello, la edil de Podemos afirmó que iba a buscar la información "en Internet", ante lo cual, el alcalde de Alicante perdía la paciencia, y reprendía seriamente a la de Pablo Iglesias.
"No, si en Internet se encuentra de todo [...] lo cual no significa que todo lo que se encuentre en Internet sea justificado. Y si es una broma, diga que es una broma, nos reímos todos y sanseacabó. pero si lo está diciendo en serio, entonces tendré que reprender duramente a los conserjes por no se sabe qué micromachismo a la hora de poner no se sabe qué aire acondicionado" resumía el alcalde popular. (El Gobierno no recurrió a los expertos hasta que no hubo 28.572 infectados)
Y pedía seriedad en el pleno del Ayuntamiento:"A ver si nos dejamos de tanto discurso extraño, raro y parnafernalias para terminar diciendo cosas que, salvo usted, no entiende prácticamente nadie. Céntrese por favor en el tema".