El Tribunal Federal de Canadá negó, por segunda vez, la entrada al país al expresidente de la Generalitat de Cataluña Carles Puigdemont, que se fugó de España a finales de 2017 tras el referéndum ilegal y el posterior intento de declarar unilateralmente la independencia en la región.
El citado tribunal resolvió que los funcionarios de inmigración que rechazaron su permiso de viaje al país actuaron de forma apropiada porque el político independentista no proporcionó la información solicitada para poder entrar a territorio canadiense.
La conspiración de Puigdemont: ha perdido completamente la cabeza tras su detención
En la sentencia, emitida el 22 de septiembre, el Tribunal Federal de Canadá explicó que Puigdemont inundó con "un envío masivo de 400 páginas" a las autoridades del país en lugar de presentar la "simple información" que se le solicitó hasta "en tres ocasiones".
El juez determinó que la insistencia de Carles Puigdemont a la hora de enviar de forma masiva esas 400 páginas es lo que le hizo "entrar en la categoría de respuestas evasivas". Eso, unido a no responder a las preguntas "fáciles y sencillas" de los funcionarios de inmigración, es lo que llevó al país a denegar su entrada.
En la primera solicitud de autorización de viaje electrónica, según comentó el juez en la sentencia, el expresidente de la Generalitat de Cataluña, negó que estuviese acusado de algún delito, a pesar de que las autoridades españolas habían cursado una orden internacional de arresto por malversación y rebelión.
Objetivo conseguido: El independentismo resurge para "defender al President" Puigdemont
En la segunda solicitud, el político separatista Carles Puigdemont cambió su respuesta pero tampoco convenció a los funcionarios de inmigración ya que sus palabras daban a entender que ya se habían retirado los cargos contra su persona.
El Tribunal Federal explica su 'no' a Puigdemont
"Si bien es cierto que la solicitud de extradición habrá sido denegada en Alemania, parece que los cargos presentados en España no han sido retirados. Como era de esperar, el funcionario de inmigración continuó investigando para averiguar más sobre los cargos", señaló el Tribunal Federal de Canadá.
"En lugar de responder preguntas simples y comentar la información solicitada, el demandante proporcionó una cantidad considerable de papel sin siquiera ofrecer una respuesta simple a una pregunta tan simple. La decisión es justificada, transparente e inteligible", sentenció el tribunal canadiense.
Las mentiras 'condenan' a Puigdemont
Las mentiras sobre si estaba acusado de algún delito y su falta de transparencia a la hora de responder a las preguntas de los funcionarios de inmigración han obligado a Canadá a cerrarle la puerta de entrada a Carles Puigdemont hasta en dos ocasiones.