Cada dos días una mujer es asesinada por su pareja o ex pareja en Francia. En lo que llevamos de año, 138 mujeres han perdido la vida en el país vecino por violencia de género.
Con tales cifras, el Consejo de Europa realizó un informe el pasado 19 de noviembre mostrando su preocupación por la deficiente protección que se otorga a las mujeres en el país galo.
“A pesar de los progresos, las cifras relacionadas con la violencia contra las mujeres y la impunidad de los agresores siguen siendo preocupantes”, reza el informe.
España es un ejemplo
Un poco más al sur, España es un modelo a seguir. Los franceses tenían la violencia machista en un segundo plano y no han empezado a reaccionar hasta ahora.
“En la lucha contra las violencias conyugales, España como modelo”.
“Contra las violencias conyugales, España a la vanguardia”.
“España, pionero en la lucha contra las violencias contra las mujeres”.
Han sido algunos de los titulares de los medios franceses donde analizan las medidas que se han implantado en nuestro país para reducir los feminicidios.
La Ley orgánica de medidas de protección integral contra la violencia de género de 2004 ha sido la referencia principal.
Algunas de las medidas
Y es que los franceses ignoraban, hasta ahora, medidas como las que hemos incorporado dentro de nuestras fronteras. Un teléfono especifico para urgencias (016), la creación de un sistema de asistencia social y apoyo jurídico, el registro público del numero de victimas el pacto nacional de 2017 (1.000 millones de euros para financiar medidas contra el maltrato) y el papel de los medios de comunicación para sensibilizar así como dar voz a la víctimas.