El déficit de las Administraciones Públicas de la Eurozona se ha disparado durante este pasado 2020, principalmente a causa de la pandemia del coronavirus, que provocaba un esfuerzo económico agigantado por parte de los diferentes Ejecutivos nacionales.
Sin embargo, la Comisión Europea confía, según sus últimos cálculos, que estas Administraciones inicien su senda de contención este año,pasando del 8% del PIB de 2020 al 3,9% al término de 2022.
Una caída en el déficit estatal que, sin embargo, Bruselas no ha extendido a España, pronosticando que ni en 2022 el país habrá conseguido bajar el déficit público del 8%, muy por detrás del resto de economías de la Eurozona.
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Así lo recoge el último Boletín económicodel Banco Central Europeo, que pronostica para España un desfase presupuestario superior al 12% del PIB para 2020, del 9,6% en 2021,y del 8,6% para 2022.
Unos números que pronostican un desfase de más de 140.000 millones entre lo que ingresa y gasta el Estado, siendo más del doble de la media europea, y que posiciona a la economía española a la cola de la Eurozona.
El Ejecutivo mantiene el optimismo en las previsiones
A pesar de que el informe del BCE no ofrece ningún tipo de opción al optimismo para los próximos años en la economía nacional, el Ejecutivo de Pedro Sánchez mantiene sus cifras presentadas para el déficit de 2020 y 2021.
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Unas cifras, contempladas en el Programa de Estabilidad y en el Plan Presupuestario, que preveen un desfase del 11,3% del PIB para 2020, el más elevado de la historia del país. y del 7,7& para el 2021.
Un déficit inferior al del 8% que Bruselas no confía en que España alcance ni siquiera a finales de 2022, año para el que España aún no ha hecho ejercicio de proyección, en comparación con el resto de miembros de la zona Euro.
