El Emir de Qatar, que rechazó un ofertón histórico por Mbappé, decidió amargarle la existencia al futbolista francés.
Mbappé está muy descontento en París y en su rostro se explica todo. Hay una imagen viral que es definitiva para entender que Kylian está metido en una cárcel, de la que es difícil salir, y cuenta los días para que sea el mes de enero.
Hay aficionados del PSG, incluido los dirigentes, que creen que pueden renovar a Mbappé, pero ese deseo está lejísimos de ser una realidad. Mbappé solo piensa en escuchar la última campana de las propias campanadas del 31 de diciembre y en que sea 1 de enero para decidir su futuro.
Está atado a París y ese hecho no le permite tener maniobra, por lo menos, hasta que pasen los meses y llegamos al de enero del 2022.
Ahí, desde el mismo día 1, Mbappé ya será el propio dueño de su destino y cambiará su amargura actual fichando por el equipo de sus sueños.
Solo piensa en descontar días del calendario y en poder firmar, libremente, por el Real Madrid. Visto está tras ese 'careto' que puso, de muy pocos amigos, mientras Neymar y Messi se estaban riendo antes de salir al terreno de juego a calentar.
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Otra dura pitada
El PSG volvió al Parque de los Príncipes y a Mbappé le volvió a caer una sonora pitada. Los aficionados lo abuchearon al escuchar su nombre por megafonía, como viene siendo de costumbre, y ayer no los pudo acallar.
Mbappé se quedó sin marcar, estando renqueante con molestias físicas, y en el PSG tuvieron que tirar de Icardi para sacar un resultado positivo ante el Lyon.
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