El periodista y editor Eduard Voltas, actual consejero delegado de la revista de ocio Time Out y que durante la consejería de Joan Manel Tresserras estaba en el departamento de Cultura, se ha convertido en una de las voces más cercanas a ERC.
Según La República, esto no sería noticia, ya que todos los partidos tienen influencers (personas con muchos seguidores en las redes sociales) que crean opinión en función de unas tesis partidistas que se siguen al pie de la letra. Hay algunos que se les ve más el plumero que a otros, o directamente quien no se esconde, que es lo más sensato.
Todo comenzó con un artículo de Voltas en el periódico El Mon, donde despellejaba a la ANC y las primarias. Jordi Graupera, uno de los líderes del proceso de selección de candidatos independientes, se sintió aludido y le contesto a Voltás.
Voltás dijo en varios tuits lo siguiente: “Es evidente que hay una discrepancia entre el argumentario oficial y las intenciones reales, yo diría que hasta existe una incompatibilidad manifiesta. Pero esto no me habria movido a escribir un artículo si no fuera por la implicación de la ANC. Aquí sí que creo que hay un fraude potencial en marcha. Los socios fuimos consultados si queríamos que la ANC se convirtiera en impulsora (también económicamente) de las primarias, y el argumento central de la dirección fue el tema de la lista única para agrupar el voto y ser la más votada para garantizar alcaldías. Salió que sí (yo voté no). Y de pronto, aquello de la lista única no valía la pena, y sí valía la pena que se presentara una 4ª lista y por tanto se dispersara más el voto. Exactamente lo contrario que se predicaba para pedir el SI en la consulta interna. Si esto se confirma, estaremos delante de un fraude a los socios de la ANC".
La respuesta de Graupera a Eduard Voltas
Graupera le contestó en otro tuit: "Escucha Jordi Voltás, tus opiniones sobre la ANC, son todas tuyas, pero esto que dices que 'las personas particulares' (permíteme sentirme aludido) que las hemos impulsado, tenemos unos objetivos diferentes de los que hemos dicho publicamente, es mentira y te agradecería que lo rectificaras".
Voltás le contestó: "Nada que decir. La participación en política es libre y todo el mundo tiene derecho y son los ciudadanos con su voto los únicos que pueden decidir si un consistorio lo componen 3 partidos o 30. Tampoco tengo mucho que decir sobre el hecho de que se declaren unos objetivos y se tengan otros. Si lo hacen los partidos de siempre, tambien lo podemos hacer algunos de los impulsores de las primarias, no faltaría más. Y al final, insisto, los que deciden son los ciudadanos".
Queda claro que el buen rollo entre los independentistas no existe, las ansias de poder son muy malas consejeras y todos quieren la tajada más grande.