La práctica de los matrimonios concertados y forzados tiene sus orígenes antiguos: la coemptio era un rito matrimonial muy extendido que se remonta a los siglos I y II de la época romana, en la que un padre podía otorgar una escritura de compraventa de su hija, para que quien la comprara se convirtiera en su pater familias.
Esta práctica se da en India, en China, en Japón, en Sri Lanka, en Pakistán, en México, en Corea del Sur, en zonas del sudeste asiático, en algunas regiones africanas y en la mayoría de los países del mundo árabe.