Lamentablemente, cada vez son más los recursos que los delincuentes utilizan día a día para cometer hurtos y estafas a los incautos, siendo las personas mayores las víctimas 'casi perfectas' de estos ladrones para cometer sus delitos, debido a la indefensión y a la credibilidad que los ancianos suelen dar a este tipo de acciones, muy preparadas por los delincuentes para resultar creíbles.
Ahora, desde Sevilla, ABC ha destapado el nuevo modus operandi de los ladrones para hacerse con el mayor botín posible en apenas unas horas: el ya conocido timo del "falso atropello".
Su sistema es muy sencillo: los delincuentes, haciéndose pasar por la Policía Nacional o la Guardia Civil, llaman a una persona de edad avanzada, explicándoles que un familiar se encuentra detenido por haber atropellado a una persona, y que hace falta un pago en metálico para conseguir la libertad, o una salida ventajosa, de este familiar en apuros.
El peligroso reto viral de TikTok que puede perjudicar gravemente a la salud
Tal es la gravedad de la noticia recibida, y la urgencia de los falsos agentes a través del teléfono, que las víctimas de la estafa suelen entrar en estado de shock, aceptando entregar joyas o dinero en metálico para ayudar a su familiar.
Los agentes avisan ante el aumento de casos
Este último año, este tipo de alertas por estafa han aumentado exponencialmente, habiéndose registrado en Alicante, al menos, tres casos. El último conocido, en Sevilla, el de una mujer octogenaria que entregó todas sus joyas a los atracadores, después de que los estafadores le hicieran creer que su hijo mayor había atropellado a una mujer.
El 'hijo en prisión' o 'hijo accidentado' son otras versiones que existen de esta estafa, con el mismo modus operandi, según han alertado desde la Policía Nacional y la Guardia Civil, que han pedido que la ciudadanía, ante estos casos, desconfíe de la llamada, y se ponga en contacto con el 091.
El raro y sorprendente trastorno que sufre una joven de 16 años: "aparento 50"
Del mismo modo, los agentes han querido señalar que, independientemente del suceso que haya ocurrido, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado nunca piden dinero en metálico a los ciudadanos, siendo ésta una primera señal para tener en cuenta a la hora de detectar una posible estafa.