"En Cataluña hay un problema de rivalidades y sillones en los que cada vez cabe menos gente"

"En Cataluña hay un problema de rivalidades y sillones en los que cada vez cabe menos gente"
"En Cataluña hay un problema de rivalidades y sillones en los que cada vez cabe menos gente"

Arancha González Laya, la ministra de Exteriores, ha dibujado un retrato realista del caos político que existe en Cataluña y alienta a que sea la sociedad catalana y luego la española quienes resuelvan el problema.

Para Arancha González Laya lo que sucede en Cataluña es un problema interno, "de sillones y rivalidades" que sólo puede resolver la sociedad. "El Gobierno de España considera que la solución a la crisis planteada por la reivindicación independentista del gobierno catalán y de una parte de la sociedad catalana debe encontrarse empezando por la sociedad catalana y después, y juntos, en el seno de la sociedad española", ha dicho ante el Pleno del Congreso.

Cuando la diputada de Junts Mariona Illamola le ha preguntado si el "conflicto entre Cataluña y España es un problema interno", González Laya le ha soltado: "Cataluña no está en conflicto con España".

El independentismo no tiene ningún  apoyo en el exterior

Y se ha cargado de razones, en respuesta al bombardeo propagandístico de la Generalitat intentando internacionalizar sus caprichos utilizando sus embajadas con dinero público, que "todos los gobiernos extranjeros, todos sin excepción, están de acuerdo" , recordándole que ningún organismo internacional, empezando por la UE y sus instituciones, ve con buenos ojos el movimiento independentista catalán.

González Laya ha invitado a la diputada de Puigdemont a reflexionar: "Ninguna autoridad, ningún gobierno, ningún organismo internacional ha reclamado la necesidad de una intervención internacional para resolver la situación en Cataluña" por mucho que los independentistas lo hayan intentado invirtiendo "tiempo y esfuerzos en ello".

Y ha recordado los problemas que tiene el separatismo para formar gobierno en Cataluña. Antes los independentistas soñaban con una Cataluña de "la mitad más uno, pero ahora como están a la gresca ya ni siquiera es esto". Y ha lanzado un mensaje irónico: ahora se conforman con "un cuarto más uno".

La ministra de Exteriores ha reprochado al separatismo que "en su Cataluña cada vez cabe menos gente y esto es un problema interno, es un problema de sillones y rivalidades", recordando que lo que quieren los catalanes es "concordia, unidad y respuesta a la crisis".

"Eso es lo que hay que darles: menos hablar y más hacer para todos y todas los catalanes y las catalanas". El zasca a la diputada Illamola ha sido de campeonato.