El tema de los presupuestos de España y de Cataluña es lo suficientemente serio como para que los políticos no se lo tomen a broma. Pero eso parece imposible. No se lo toman en serio.
Se supone que la votación favorable o contraria a una propuesta de presupuestos se debe valorar en función del criterio que tengan las formaciones acerca del gasto en Sanidad, Educación, Infraestructuras, Defensa, etc. y también sobre el criterio de la recaudación de impuestos en los ingresos. Sin embargo, en España esto no funciona así. (¡Qué fuerte! Podemos ofreció a ERC la cabeza de Borrell a cambio de su apoyo en los presupuestos)
El vergonzoso mercadeo de votos
Estamos ante un vergonzoso mercadeo de votos. Si me sacas a los presos de la cárcel, te doy mi voto, le dicen las formaciones independentistas a Sánchez. Y en Cataluña sucede tres cuartas partes de lo mismo: si votas mis presupuestos en Madrid yo voto a favor de los tuyos en la Generalitat, le dice Iceta a los independentistas catalanes. Lo de menos es el contenido de las propuestas económicas. Los presupuestos sólo sirven para negociar otras cosas que nada tiene que ver con la economía que afectara a los ciudadanos españoles durante el próximo año. (¡Vergonzoso! A Junqueras le importan un rábano los presupuestos y mantiene su vil chantaje)
Y como muestra, un botón. Hoy el presidente del grupo parlamentario PSC-Units, Miquel Iceta, ha advertido al Govern de que, si bloquean los Presupuestos Generales del Estado (PGE), que después no les busquen para sacar adelante las cuentas catalanas.
Durante la primera reunión del grupo parlamentario que han realizado de forma abierta a los periodistas, ha insistido en que la exigencia de los socialistas es aprobar los PGE para ampliar el margen económico y financiero de Cataluña y de los catalanes, y después discutir cómo aplicar estos recursos".
Si tú me das, yo te doy
"Si el propio Govern impide aplicar unos beneficios para Cataluña ampliando estos márgenes, que después no nos vengan a buscar para sacarles las castañas del fuego" con los presupuestos catalanes, ha subrayado. Y ha instado al Govern de Quim Torra y al vicepresidente del Ejecutivo catalán y conseller de Economía, Pere Aragonès, a aprobar los PGE porque, además de los compromisos que contienen para Cataluña, supone dar "estabilidad" al Estado. (¡País de locos! España, Cataluña y Barcelona, sin presupuestos)
Ha defendido que ni al Govern ni a los catalanes les interesa "perder más tiempo" tras destacar que, desde el impulso del proceso independentista de los últimos gobiernos catalanes, Cataluña no tiene ni más competencias, ni más recursos, ni se han iniciado más grandes proyectos ni inversiones.
De hecho, ha comparado la situación en los últimos años entre la comunidad catalana y el País Vasco, que fue clave en los últimos presupuestos aprobados por el PP y que también es parte en la negociación del proyecto de presupuestos de Pedro Sánchez. "Con los PGE, Catalunya será tratada como desde hace mucho tiempo que no se hacía, con justicia", ha insistido el dirigente socialista.
Aviso a PP y Ciudadanos
También ha planteado cuál puede ser la alternativa en caso de impedir la aprobación de las finanzas estatales y desestabilizar el Gobierno socialista: una alianza entre PP, Cs y Voz que apueste por un "155 perpetuo".
De hecho, se ha referido a los líderes de PP, Pablo Casado, y de Cs, Albert Rivera, a los que ha advertido que para aplicar el 155 primero tiene que darse un incumplimiento de la ley, y les ha recordado que ese artículo no está pensado para "acabar con el independentismo".