Irene Montero y Pablo Iglesias forman una de las parejas políticas más polémicas y mediáticas del panorama político actual.
Y es que, además de su repentino romance, ambos podemitas han llevado a cabo acciones y decisiones que han criticado a otros partidos: desde la compra de su mansión en Galapagar, abandonando su 'querido' barrio de Vallecas, hasta el supuesto nombramiento de Montero como ministra de Igualdad por ser la pareja del líder de los morados.
Acciones que parecen no haber gustado en el pueblo del padre de Montero, Tornellas, Ávila, donde guardan "silencio" sobre la relación entre la ministra e Iglesias.
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"En el pueblo no nos gusta" ha confesado el tío paterno de Irene Montero sobre su pareja, el actual vicepresidente segundo del Gobierno "Somos gente humilde, preocupada por sacar adelante la ganadería y la tierra.Los obreros y los trabajadores no pueden sentirse identificados con un político que deja tirados atodos para irse a una casa que vale millones"
"Ha hecho lo contrario a lo que decía" ha lamentado el familiar de la ministra de Igualdad, representando así el malestar de todo el pueblo, tal y como ha podido saber el diario La Razón.
Irene Montero nunca tuvo interés en la política
Pero, si bien Pablo Iglesias ha cambiado radicalmente su discurso desde su llegada como número 3 del Gobierno de coalición, en el pueblo también se sorprenden del brutal cambio de Irene Montero.
"Nunca ha dado señales de que le gustase la política o quisiera dedicarse a esto" asegura el tío de Montero, quien afirma que la actual ministra se vio tentada a vivir de lo público tras conocer a la "camarilla" compuesta por Iglesias, Errejón y Monedero.
"La llevaron a esto" asegura. Un cambio radical que no ha pasado desapercibido para la gente humilde del pueblo, asombrados ante el radical ascenso de Montero en la política española, pasando de ser una cajera de una gran supericie, sin experiencia laboral extensa, a dirigir un Ministerio, y ser la 'mano derecha' del Vicepresidente Segundo del Gobierno.