El terrible testimonio de uno de los supervivientes de la matanza de Charlie Hebdo

Un superviviente de la masacre de Charlie Hebdo describe ‘in situ’ el horror vivido ese 7 de enero de 2015 en París

03 de Septiembre de 2019
El terrible testimonio de uno de los supervivientes de la matanza de Charlie Hebdo
El terrible testimonio de uno de los supervivientes de la matanza de Charlie Hebdo

El escritor y periodista Philippe Lançon (Vanves, 1963) fue gravemente herido en el atentado de la revista ‘Charlie Hebdo’: dos balas le destrozaron la mandíbula.

Ahora, cuatro años después, ha llegado a España ‘El colgajo’ (Anagrama), un libro que ha cosechado un gran éxito en Francia en el que relata los hechos tal y como los vivió.

Concretamente, es el capítulo cuarto, titulado ‘El atentado’, el que describe desde dentro los terribles hechos que tuvieron lugar el 7 de enero de 2015 en la redacción de la revista satírica ‘Charlie Hebdo’ de París, donde dos hombres encapuchados entraron con fusiles de asalto gritando "Al.lahu-àkbar" (‘Alá es el más grande’) y asesinaron a doce personas. La rama yemení de Al Quaeda reivindicó el atentado.

La crónica es espeluznante, pero los recuerdos y las reflexiones también. Una novela ‘real’ que cuenta como se puede vivir después de que te destrocen la cara con dos disparos y de ver como matan a tus amigos delante de ti.

Sobre Charb, el 'alma' de 'Charlie Hebdo'

"En ese mismo instante, Sigolène cruzó una mirada con Charb (el director de ‘Charlie Hebdo’) y supo que él sabía de qué iba. No es de extrañar: Charb no se hacía muchas ilusiones sobre lo que los hombres son capaces de hacer, carecía de todo carácter patético, de toda noción de pomposidad, y era por eso por lo que, encaramado como un hurón al bigote de Stalin, resultaba tan divertido. Seguramente no necesitó los segundos de vida que le quedaban para comprender de qué historieta salían aquellos dos cabezas huecas con pasamontañas que traían el fanatismo y la muerte para contemplarlas como lo que eran antes de que lo mataran".

Los hermanos Kouachi cambiaron radicalmente la vida de Philippe Lançon: perdió a sus mejores amigos y ha tenido que someterse a 18 operaciones de cirugía facial.

Escribir sobre el atentado

"Aún hoy me cuesta soportar dicha confusión: los hechos son el único equipaje que hubiera querido llevarme en el viaje que vino después; pero los hechos, como todo lo demás, se deforman con la presión. La violencia había pervertido lo que no había logrado destruir. Como una tormenta, había hundido la embarcación. Los recuerdos subían a la superficie en desorden, deformados, inservibles, a veces incluso irreconocibles, pero con una presencia firme. Apenas había vivido el instante cuando sus restos se depositaban en desorden en la isla a la que había sido arrastrado, en esa sala pequeña saturada de papel, sangre, cuerpos y pólvora. Estaba obligado a hacer una selección imposible pero indispensable, igual que hace Robinson Crusoe con los vestigios de su barco. Por cierto, me doy cuenta de que este barco no tiene nombre, y en vísperas de una travesía hospitalaria y de una estancia insular y psíquica en la que tú, lector, quizás me acompañes, me pregunto con cierta desazón cómo es posible que el famoso náufrago se embarcara en un barco que no había sido bautizado. Con cierta desazón porque, a estas alturas, no sé cómo bautizar mi propia embarcación, por no hablar de mi isla -o, más exactamente, mis islas-. Si escribir consiste en imaginar todo lo que falta, en reemplazar el hueco con cierto orden, lo que yo hago no es escribir: ¿cómo iba a poder crear la menor ficción cuando a mí se me ha tragado una ficción? ¿Cómo erigir un orden cualquiera sobre semejantes ruinas? Es como pedirle a Jonás que se imagine que vive en el vientre de una ballena. Yo no necesito escribir para mentir, imaginar o transformar lo que me pasó. Me bastó con vivirlo. Y, pese a todo, escribo".

‘El colgajo’ es una reconstrucción de 500 páginas de los terribles hechos que nunca debieron ocurrir: ‘Je suis Charlie’.