El presidente de Òmnium Cultural, el golpista encarcelado Jordi Cuixart, ha podido verter mierda contra España al gusto en un artículo publicado en el diario escocés The National. En éste, denuncia que está “secuestrado” por el Gobierno español y se autodefine como “preso político”, como si la rebelión del 1 de octubre de 2017 no fuera con él. ¡Hay que tener jeta!
“Desde hace un año, estoy encerrado en una celda y miro el cielo a través de barras. Desde hace un año, he visto a mi hijo de 18 meses unas pocas horas al mes. Desde hace un año, no tengo teléfono ni acceso a Internet”, comienza Cuixart en su carta, en la que asegura que fue detenido por “defender los derechos fundamentales en cualquier democracia, como la libertad de expresión y la libertad de reunirse y protestar”. Según él, el Gobierno le tiene retenido sin ninguna potestad: “Desde hace un año, soy un preso político, un rehén en poder del gobierno español”, anuncia.
Cuixart define a España como una dictadura
El golpista, encarcelado desde el pasado 17 de octubre de 2017, se atreve a insinuar que España vive una dictadura: “Si España es una democracia, ¿cómo es esto posible? ¿Cómo puede haber presos políticos si la dictadura de Franco supuestamente terminó hace más de 40 años?”, pregunta. Todavía no se ha dado cuenta de que en las democracias se respetan las leyes de todos, en el caso de España la Constitución, y eso es algo que él y sus amiguetes no hicieron.
“España tiene un enorme problema político con Cataluña, pero es incapaz de enfrentarlo de la única manera posible en las democracias modernas, que es una solución política. En su lugar, están tratando de resolverlo con la policía y los jueces, sin darse cuenta de que esto solo empeora el problema”, continúa Cuixart.
Su hipocresía no tiene fin cuando habla de déficit en la democracia española y alude a las condenas contra algunos cantantes por sus “esfuerzos artísticos”: “Desde hace algún tiempo, no solo los catalanes a favor de la independencia son procesados por ejercer sus derechos básicos, ya que España ha cerrado sitios web y periódicos e incluso condenado a cantantes y titiriteros por sus esfuerzos artísticos”, proclama. ¡Y no se le cae la cara de vergüenza!
Reclama la mediación europea
Para finalizar, Cuixart reclama que la Unión Europea actúe en su favor: “Dado que ningún progreso parece posible con el Gobierno español, tal vez sea el momento de la mediación internacional donde la propia UE o un gobierno europeo desempeñan un papel”, finaliza. Precisamente a estos organismos europeos anuncia que recurrirá en el caso de que la justicia española le condene por rebelión y sedición.