El Rufián más rufián, borde y maleducado no consigue intimidar a De los Cobos

Tenso enfrentamiento entre Rufián y Diego Pérez de los Cobos en la comisión del Congreso por el caso Kitchen

El Rufián más rufián, borde y maleducado no consigue intimidar a De los Cobos
El Rufián más rufián, borde y maleducado no consigue intimidar a De los Cobos

Gabriel Rufián y el coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos han mantenido un agrio enfrentamiento en la comisión del Congreso de la Operación Kitchen. El portavoz de ERC mostró su cara más barriobajera mientras Pérez de los Cobos mantuvo el tipo y no perdió los nervios, algo que no era fácil. A los ataques de Rufián se unieron los de las representantes de JxCat y la CUP.

 "No grite, no me vacile, que no está en una caserna [cuartel]", le ha dicho Rufián a Pérez de los Cobos en un tenso intercambio de palabras. "¡No me interrumpa!", "¿puedo intervenir sin que me interrumpa?", "voy a intentar contestar por quinta vez", "¿puedo ya contestar?", "estoy hablando yo". Pérez de los Cobos intentaba responder a todas las preguntas, mientras que a Rufián sólo le interesaba el show quedando bien ante los suyos descalificando a uno de los jefes del operativo del 1-0 en Cataluña.

Tuvo que intervenir la presidenta de la comisión y los portavoces de otros grupos parlamentarios para poner orden en la sala.

El ajuste de cuentas de Rufián

A Rufián la Operación Kitchen le importaba muy poco. Lo que pretendía era ajustar cuentas cara a cara con De los Cobos por su participación en la defensa de la Constitución en Cataluña durante el pretendido golpe de estado que se produjo en octubre de 2017.

Rufián le ha insinuado que el Código Penal contempla el falso testimonio en una comisión parlamentaria, dudando de su palabra, y Pérez de los Cobos ha respondido que "a estas alturas nadie va a pensar que me van a intimidar soltándome un artículo del Código Penal". l

"No grite, no está en una caserna, le recuerdo que está aquí por un hecho muy grave en torno a sus responsabilidades", le ha soltado Rufián a De los Cobos. Y luego le ha pedido explicaciones sobre su destitución por parte del ministro Marlaska como jefe de la Comandancia de Madrid, a lo que De los Cobos se ha negado a responder porque ese no era el objeto de la investigación por el que estab citado en la comisión.

Entonces Rufián, como su estilo barriobajero habitual, le ha espetado: "Ahora decido yo hacer la siguiente pregunta y se calla". Y le ha preguntado por su intervención como coordinador del dispositivo policial en el 1-O y su decisión de "apalear a la gente en un colegio electoral", un tema que tampoco estaba en la orden del día.

"No puedo permitir que se utilicen los términos de apalear a la gente para calificar...", ha empezado a decir De los Cobos, y Rufián le ha vuelto a interrumpir: "¿se masajeó a la gente?".

Y De los Cobos ha contestado: "Déjeme responder a una cuestión muy grave que se ha afirmado en esta sala. Las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado llevaron a cabo una actuación ese día que no es el objeto de esta comparecencia, pero yo no puedo dejar pasar por alto que se acuse a dignísimos profesionales que llevaron a cabo una labor dificilísima con absoluta profesionalidad, a que se les acuse de apalear a nadie, porque eso no fue así".

"¡Verguenza debería darle! ¡Mil heridos!"

Y entonces Rufián ha saltado al ruedo en busca de sangre:

-Rufián: Vergüenza debería darles. Mil heridos.

-De los Cobos: Si hablamos de vergüenza...

-Rufián: Dígame, dígame, ¿cuál es la vergüenza?

-De los Cobos: Vergüenza algunas cosas que estamos viendo durante esta tarde.

El tiempo se le acababa a Rufián y ha optado por concluir lanzando otra pregunta capciosa: "¿Cómo lleva que no se haya descubierto ni una sola urna el 1-O?". 

Luego la diputada de JxCat, Míriam Nogueras, ha insistido en el tema del 1-O y le ha reprochado a De los Cobos que "decidió que se iba a cargar de manera desproporcionada y si hacía falta con el grito del 'a por ellos'". Por su parte, Mireia Vehí, de la CUP, le ha insultado directamente y le ha llamado "mero mercenario del estado que no se merece ni la vergüenza".

Así funcionan estos separatistas que defienden a Cataluña en Madrid mostrando un nivel que no guarda ninguna relación con lo que debe esperarse de un parlamentario.