El River-Boca se jugó en Madrid y la violencia se quedó en Buenos Aires

20 detenidos y 3 policías heridos en los incidentes que tuvieron lugar durante la celebración de los ultras de River en Buenos Aires

10 de Diciembre de 2018
El River-Boca se jugó en Madrid y la violencia se quedó en Buenos Aires
El River-Boca se jugó en Madrid y la violencia se quedó en Buenos Aires

Mientras en Madrid el enorme dispositivo policial evitó cualquier tipo de incidente, en Buenos Aires la fiesta de los aficionados de River Plate acabó con violencia y heridos.

La Policía ha tenido que desalojar esta madruga el Obelisco de Buenos Aires por culpa de los graves disturbios protagonizados por los hinchas de River.

Los ultras millonarios lanzaron piedras y otros objetos a los agentes de policía encargados de la seguridad en la zona del Obelisco en Buenos Aires.

Tras conquistar la Copa Libertadores en Madrid (3-1), un grupo de aficionados violentos de River empezó a agredir a la gente, a pelearse entre ellos y a arrojar objetos contra la policía y contra las furgonetas de las cadenas de televisión en Buenos Aires.

Los ultras de River lanzaron piedras y otros objetos a los agentes de policía

Las fuerzas de seguridad tuvieron reaccionar tirando gases y disparando balas de goma contra los ultras.

Finalmente, la Policía desalojó la zona del Obelisco en unos disturbios que terminaron con 20 detenidos y 3 policías heridos con traumatismos.

Numerosos aficionados de River se concentraron en los aledaños del estadio Antonio Vespucio Liberti, conocido como el Monumental.

En total, alrededor de 20.000 seguidores celebraron la victoria de River en ambos puntos de la ciudad, pero una vez más, los ultras violentos enturbiaron lo que debía ser una fiesta del fútbol.

Los aficionados violentos de River que lanzaron piedras contra el autobús de Boca (hiriendo a varios futbolistas) cuando llegaba al Monumental, y obligaron a suspender el partido de vuelta del 24 de noviembre, volvieron a ser ayer la vergüenza del fútbol en Buenos Aires.

Incidentes violentos en Buenos Aires