El Real Madrid lleva muchos años siendo un equipo mucho más competitivo en Europa que en España, una diferencia que se sustenta en algo más que el gen ganador del club blanco en el viejo continente. Nos referimos al factor arbitral.
Mientras que en España los blancos reciben un trato perjudicial por parte de los colegiados, en Europa la vara de medir es diferente y hay más igualdad arbitral.
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No es una cuestión de opinión, es una cuestión de números: si el Real Madrid no ha ganado más veces la Liga en los últimos años ha sido simplemente por detalles, y uno de esos detalles que han marcado la diferencia han sido los árbitros.
Los números no engañan: en los últimos cinco partidos de Liga de Campeones, el Real Madrid ha visto cómo le pitan 2 penaltis a favor. Es lo lógico cuando estás más tiempo en el área rival que en otra zona del campo. No obstante, en competiciones nacionales (Liga, Copa del Rey y Supercopa), el equipo de Zidane encadena 22 partidos consecutivos sin que le piten una pena máxima. Y no precisamente porque no se hayan producido.
Diferencia abismal
La diferencia es abismal y refleja una realidad: que el Real Madrid no tiene 'suerte' con los árbitros en España. Es un eufemismo que el club blanco ha utilizado para no hablar de escándalos arbitrales en los últimos tiempos.
El saldo arbitral llama mucho la atención en cuanto a los penaltis señalados a unos equipos y a otros, tanto a favor como en contra, y también en cuanto a las expulsiones a favor y en contra en los partidos de los equipos grandes.
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Muchos se preguntan qué está pasando en España para que el Real Madrid esté en esta situación respecto a los árbitros. Ni siquiera la salida de Ángel María Villar y de Victoriano Sánchez Arminio de la RFEF han servido para que el club blanco reciba un trato más equitativo. Tampoco la implantación del VAR ha solucionado demasiado, ya que en muchas ocasiones se muestran imágenes poco claras que dan lugar a la sospecha de la manipulación.
Florentino Pérez lo tiene claro: ganar una Liga en el Real Madrid en estos tiempos vale por dos o por tres. Y la Champions es el único título que el club blanco puede ganar sin tener que luchar en cada partido contra doce.