Al Real Madrid se le están acumulando los problemas día tras día. Además de tener que buscar jugadores que refuercen la parcela ofensiva del equipo de cara a la temporada que viene para hacer un equipo aún más competitivo para luchar por todas los títulos que se van a poner en juego y tener que hacer frente a una gran operación salida para que estos nuevos jugadores puedan llegar al Santiago Bernabéu, a partir del 30 de junio tendrá que ocuparse de ciertos asuntos de los que no se había preocupado hasta el momento.
Hace apenas 10 días hasta 4 jugadores que han estado cedidos esta campaña volverán a la disciplina blanca lo que supondrá un nuevo quebradero de cabeza tanto para la directiva como para Carlo Ancelotti. Álvaro Odriozola, Borja Mayoral, Takefusa Kubo y Reinier se incorporaron junto al resto de sus compañeros a partir del pasado 8 de julio a los entrenamientos del conjunto blanco y han estado intentando convencer al técnico italiano de que tienen el nivel suficiente para defender la elástica blanca durante la larga temporada que espera disputar el cuadro blanco este próximo año.
Los casos de Borja Mayoral y Álvaro Odriozola son muy diferentes a los de Takefusa Kubo y Reinier. Los dos españoles llegan para intentar ser los refuerzos que buscan tanto la directiva como Ancelotti para reforzar el lateral derecho y la delantera, puestos que se quedarán sin apenas efectivos, ya que Mariano y Jovic se encuentran en la rampa de salida y Lucas Vázquez ha servido como parche cuando Dani Carvajal no estaba, pero no ha ocupado su posición natural de extremo.
En el caso del japonés y el brasileño, no hay hueco aparente para ellos por lo que tendrían que buscar una nueva cesión que les permitiese seguir desarrollándose para intentar volver de nuevo en el verano de 2023. El centro del campo está bastante ocupado y aunque los dos puedan jugar en posiciones de ataque, las plazas de extracomunitarios están ocupadas lo que les impide formar parte de la plantilla la temporada que viene.
Kubo ya tiene nuevo destino
Reinier no ha tenido el protagonismo deseado en el Borussia Dortmund, y aunque ha jugado partidos y haya marcado algún que otro gol no ha llegado al nivel deseado por parte del Real Madrid por lo que se le volverá a buscar una salida. En los últimos días, distintas informaciones indican que el conjunto blanco estaría negociando con el Benfica para acordar la cesión por un año del joven ex del Flamengo.
Kubo lleva tres temporadas siendo cedido, tras su llegada en 2019 desde el Tokio F.C. el japonés ha dejado destellos de su calidad aunque no ha sido tan determinante como se esperaba cuando se le fichó. El `Messi japonés` apodado así por sus similitudes con el argentino y su paso por la Masía ha estado cedido en el Mallorca en dos ocasiones, el Villarreal y el Getafe.
En su primera temporada en el Mallorca completó un gran año lo que le permitió revalorarse de los 2 millones de euros hasta los 13,5 según Transfermarkt. Tras esa gran temporada, volvió a marcharse cedido, en esta ocasión al Villarreal para jugar competición europea. Emery apenas contó con él, por lo que en invierno el Real Madrid decidió romper esta cesión y volverlo a ceder al Getafe. Tras una campaña gris, la temporada pasada volvió a ser cedido al Mallorca pero tampoco demostró ese gran juego de su primer año en las islas. En esta ocasión el japonés pondrá rumbo a San Sebastián para jugar en la Real Sociedad.
El equipo donostiarra contará con Kubo en propiedad aunque el Real Madrid se ha reservado el 50 por ciento de los derechos del jugador para poder llevarlo de vuelta al Santiago Bernabéu en algún día si en el club blanco lo consideran oportuno.