El Real Madrid no las tiene todas consigo con el fichaje de Eduardo Camavinga, centrocampista francés del Rennes que Zinedine Zidane recomendó el pasado verano para su medular.
Las circunstancias de la pandemia sumadas a la clasificación del Rennes para la Liga de Campeones provocaron que el joven futbolista, que cumplió 18 años hace un mes, no aterrizara en Chamartín. Y ahora puede que ya no lo haga.
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La temporada actual, Camavinga no está rindiendo al más alto nivel y en el club blanco tienen dudas. ¿Y si Camavinga solo ha sido flor de un día y no va a convertirse en el gran futbolista que se esperaba?
Esta incógnita hace que el Real Madrid está observando en el mercado otras opciones por si finalmente el francés no termina de convencer. Lo que es un hecho es que el Madrid no pagará 80 millones de euros por el jugador.
Su precio ha bajado
De hecho, ahora mismo se especula con que el Rennes podría aceptar una oferta de unos 50 millones de euros, cantidad que el Real Madrid sigue viendo demasiado elevada.
Florentino Pérez tiene la intención de mantener la política de fichajes que ha llevado desde hace varios años, intentando fichar a los mejores jugadores del mundo en edad temprana para que su precio no se dispare.
No obstante, pagar 50 millones por un jugador que no está hecho y que no se sabe cómo puede responder sigue siendo un riesgo. Y el bajón de Camavinga ha hecho que el Real Madrid se lo replantee todo.
Zinedine Zidane insiste en que hay que aprovechar la oportunidad y ficharle ahora que los demás candidatos a su contratación están en las mismas. En medio de la duda, el club blanco puede ser el más listo y llevarse a un crack de futuro a precio de saldo... O quizá llevarse a una promesa fallida a precio de oro.