El Real Madrid ha vuelto. Zinedine Zidane ha conseguido por fin la reacción que deseaba de sus jugadores, que ya encadenan varias buenas actuaciones consecutivas con victoria. Concretamente, desde la bronca del técnico con la prensa.
"Nosotros merecemos poder trabajar, el año pasado nosotros ganamos la Liga y tenemos derecho a pelear nuestra Liga. Por lo menos este año. El próximo año hay que hacer cosas y a lo mejor hay que cambiar, pero dejad pelear a esta plantilla. Los que ganaron la Liga el año pasado, no hace diez años. Solo un poco de respeto", espetó Zidane hace unos días ante los medios.
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Zidane estalló ante las preguntas sobre su posible salida del equipo y la probable revolución en la plantilla. Y su enfado, que luego trasladó también al equipo, ha sido clave para que los jugadores vuelvan a activarse.
Desde entonces, van tres victorias consecutivas ante el Huesca, el Getafe y el Valencia. Y con muy buenas sensaciones. Fundamental para que el equipo llegue con confianza al tramo final de la temporada y también a la lucha por la Liga de Campeones.
La plantilla le ve las orejas al lobo
Un poco porque se lo deben a Zidane y un poco porque la plantilla le está empezando a ver las orejas al lobo, el Real Madrid ha vuelto a convertirse en un hueso duro de roer.
Hace unas semanas, cualquier equipo le hincaba el diente a los blancos con facilidad. Pero ahora ha recuperado la seriedad defensiva, ha recuperado la ambición, ha recuperado las ganas de ganar. Y los jugadores están empezando a carburar.
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Sobre todo, Zidane ha logrado convencer a los jugadores de que tienen derecho a pelear por el título de Liga, tal y como les dijo a los periodistas en esa rueda de prensa telemática en el que alzó la voz para dejar claro que estaban faltando al respeto a los suyos.
La plantilla siente que esa defensa de Zidane no puede caer en saco roto. Tienen que devolverle la confianza luchando hasta el final para ganar la Liga o, al menos, para quedar lo más cerca posible de la machada. Y lo que consigan (o no) en Liga servirá para que los blancos lleguen lo mejor preparados posible para medirse al Atalanta en la Champions.