El Bayern de Múnich tiene un serio problema con cinco futbolistas del primer equipo que están en contra de vacunarse contra el coronavirus y que se encuentran en cuarentena por haber estado en contacto estrecho con una persona que ha dado positivo en la enfermedad.
Se trata de Joshua Kimmich, Serge Gnabry, Jamal Musiala, Eric Maxim Choupo-Moting y Michael Cuisance. Los cinco futbolistas del Bayern de Múnich se niegan a recibir el pinchazo para estar inmunizados contra el coronavirus y el club germano ha tomado medidas.
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Todos ellos serán baja este martes en el encuentro de la UEFA Champions League ante el Dinamo de Kiev por estar en cuarentena y el conjunto alemán ha optado, según el diario Bild, por recortarles el sueldo por no haberse puesto la vacuna, una cuestión que está amparada por la legislación alemana.
Como respuesta, los jugadores afectados podrían estar estudiando emprender acciones legales contra el club bávaro ya que no consideran justo que les recorten su salario por no haberse querido poner la vacuna contra el coronavirus, algo que no es obligatorio para la población aunque si es recomendable.
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La postura de los antivacunas amenaza con desgarrar la unidad del vestuario. Por un lado, algunos futbolistas como Leroy Sané ya han pedido públicamente al resto de sus compañeros que se vacunen para que eso no afecte a los resultados del equipo.
Asimismo, el club está haciendo fuerza desde dentro para que estos futbolistas acepten ponerse la vacuna, lo que está provocando una guerra interna que podría saldarse con la salida de varios futbolistas que se mantienen firmes en su idea de no vacunarse contra el coronavirus.
El Real Madrid, muy pendiente
El Real Madrid está muy atento a esta situación ya que le interesan dos futbolistas del Bayern de Múnich que no se han puesto la vacuna y que podrían forzar su salida el próximo verano si la situación se vuelve insostenible. Se trata de Joshua Kimmich y Jamal Musiala.
Kimmich es un jugador consagrado que lleva tiempo en la órbita del club blanco pero el Bayern de Múnich se niega a dejarle marchar mientras que Musiala es una de las grandes promesas del fútbol europeo. Esta guerra interna podría llevarles a declararse en rebeldía y marcharse.
El conjunto blanco tiene todo preparado para hacer una ofensiva por los dos cracks del Bayern de Múnich en caso de que la situación se vuelva insostenible dentro del club.