El Real Madrid está más en el barco de la Superliga que nunca tras los últimos acontecimientos. Cada cosa que pasa no hace más que reafirmar el interés del club blanco en conseguir llevar a término el proyecto.
Tras el caso Mbappé, en el club blanco han sentado muy mal las declaraciones del presidente del PSG y de la ECA (Asociación de Clubes Europeos), Nasser Al Khelaifi, refiriéndose al propio Madrid, al Barça y la Juve: "Inventores de fábulas y fracasos", los ha calificado.
La llegada de Mbappé al Madrid puede adelantarse a enero: última oportunidad para el PSG
A esto le sumamos también que las cosas en LaLiga tampoco están muy bien, después de que Tebas haya permitido una nueva desigualdad al aplazar el Sevilla - Barça por los problemas para volver de los internacionales de las rondas sudamericanas de clasificación para el Mundial de Catar. En cambio, el Madrid, que también tenía internacionales perjudicados por lo sucedido, tendrá que jugar ante el Celta.
El circo es mayúsculo, la indignación va en aumento en el Real Madrid y en la sombra Florentino Pérez sigue trabajando para que el proyecto de la Superliga salga adelante.
2023, fecha límite para la Superliga
El presidente madridista está convencido de que puede conseguir poner en marcha la Superliga en un plazo límite de dos años máximo: para 2023, estará en marcha.
Ahora se están dilucidando ante la justicia todos los asuntos legales, pero el optimismo de los clubes rebeldes es total: la justicia europea fallará a su favor y el proyecto seguirá en marcha. Los clubes que se bajaron se volverán a subir en cuanto comprueben que las amenazas de la UEFA no tienen ningún fundamento.
Muy pronto, el fútbol europeo va a vivir un cambio radical para convertirse en uno de los mayores espectáculos del mundo tras la pérdida de protagonismo de los últimos años.
Fabrizio Romano desvela un posible fichaje sorpresa para el Real Madrid 2022-23
Al Khelaifi, Ceferin y Tebas están cada vez más cerca de recibir la derrota más dolorosa de sus vidas a manos de Florentino Pérez. El 'ser superior' ataca de nuevo.