El Gobierno de España, formado por PSOE y Unidas Podemos, está intentando silenciar la investigación por las supuestas cartas amenazantes que recibieron varios miembros del Ejecutivo liderado por Pedro Sánchez.
Esas misivas llegaron durante la campaña electoral para las elecciones madrileñas. Isabel Díaz Ayuso era la gran favorita para imponerse en las urnas y Grande-Markaska, Pablo Iglesias y María Gámez unas cartas amenazantes.
El PSOE y Unidas Podemos las utilizaron durante la campaña electoral para intentar que Isabel Díaz Ayuso no ganase las elecciones y llegaron a denunciar las amenazas ante la justicia.
Ahora, se ha archivado la investigación sin que existe ningún sospechoso y las 'víctimas' de estas amenazas no han insistido en que el caso siga abierto para conocer al culpable.
Marlaska podría estar en los "minutos de descuento" al frente de Interior
Carpetazo a la investigación
El juzgado de Instrucción número tres de Madrid ha acordado el sobreseimiento provisional a las denuncias puestas por las cartas que recibieron la directora de la Guardia Civil, María Gámez Gámez, el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska y el exvicepresidente del Gobierno Pablo Iglesias.
"Tienes diez días para dimitir. El tiempo de reírte de nosotros se terminó. Policía Nacional. Guardia Civil. El tiempo lo tienes en contra para los taponazos", le escribieron a Marlaska.
"Has dejado morir a nuestros padres y abuelos. Tu mujer, tus padres y tú estáis sentenciados a la pena capital. Tu tiempo se agota", se pudo leer en la carta dirigida a Pablo Iglesias.
Marlaska encargó a la policía que buscase a la persona o personas que les habían amenazado pero la justicia ha puesto fin al caso. Ahora cabe la posibilidad de presentar un recurso para que siga la investigación.
Intento de 'pucherazo'
A raíz de la decisión de la justicia, que no ha localizado a la persona que escribió las cartas, cobra fuerza la teoría de que se trató de un intento desesperado de evitar el triunfo aplastante de Isabel Díaz Ayuso en Madrid.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, a pesar de esta campaña para hacerla perder votos, se impuso en las urnas y siguió al frente de la comunidad autónoma.