Pedro Sánchez prometía a sus votantes, en las últimas elecciones, que nunca cedería a las exigencias de los nacionalistas catalanes, asegurando que el PSOE incluso buscaría reforzar las penas contra el delito de sedición, y que no habría indultos o amnistías posibles para los líderes del procés.
Palabras que se veían desmentidas estos últimos días, cuendo el Ejecutivo nacional del socialista aprobaba en Consejo de Ministros la medida de gracia a los condenados del 1-O, teniendo que reconocer finalmente el presidente del Gobierno que, pese a sus promesas electorales, había cambiado de opinión.
Sin embargo, tal y como ha podido saber Dolça Catalunya, los indultos, así como un posible referéndum en Cataluña, formaban parte del plan de Pedro Sánchez desde enero de 2016, habiéndolo asegurado así el propio Miquel Iceta, actual ministro de Política Territorial y Función Pública, ante los medios de comunicación.
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"Estamos comprometidos más que nunca en la vía del diálogo, la negociación y el pacto, como único mecanismo para resolver el problema del encaje entre Cataluña y el resto de España" aseguraba el actual ministro "Pedro Sánchez ha acertado en su planteamiento".
Un planteamiento que contemplaba la creación de un Gobierno nacional "con la participación y apoyos de aquellos que quieran hacer posible el cambio en España".
Cumpliendo el plan, hasta la llegada de una España federal
Así pues, el exdirigente del PSC aseguraba en 2016 que el plan de remodelación política que seguiría Pedro Sánchez culminaría "en la reforma constitucional federal que deberá ser sometida a referéndum".
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"Hay que llegar a acuerdos en torno a las decisiones que no pueden esperar [...] abriendo la reforma constitucional, la creación de un Estado federal" aseguraba Iceta en aquel entonces; unas palabras que, tras la concesión de los indultos y las presiones del Gobierno al Tribunal de Cuentas, han sido ahora repetidas por el ministro de Política Territorial.
Es necesario "un gran acuerdo sobre autogobierno, financiación y participación de las comunidades autónomas en el diseño de las políticas del Estado" defendía esta semana, tras los indultos, Miquel Iceta, que incluía en este acuerdo "estructuras de tipo federal que permitiría compaginar el autogobierno con el gobierno compartido".