Esquerra Republicana de Cataluña parece dispuesta a renunciar a sus principios fundamentales que pasan por la vía unilateral para conseguir la independencia.
Ese sería el resultado de las negociaciones que el PSOE y ERC están manteniendo para conseguir el apoyo, en forma de abstención, de los independentistas en la sesión de investidura de Pedro Sánchez.
ERC no se desdice de su objetivo de conseguir hacer de Cataluña una república independiente, pero entiende que en el momento actual las reivindicaciones de Cataluña deben seguir otros caminos, por ejemplo el del diálogo multilateral.
Ábalos y Asens descubren el pastel
Tanto el secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, como el portavoz de los comunes en el Congreso, Jaume Asens, han compartido esta tesis que sitúa a los republicanos catalanes en el bando constitucional, algo que hasta ahora no parecía posible.
Ábalos ha dicho en TVE: “Sí, estoy convencido de que sí. El acuerdo es parte de esa conclusión”. Y Asens ha dicho en RNE que “es evidente que Torra ha sufrido un desgaste grande y está solo en el Govern, incluso ante muchos de los suyos, y que ERC está dejando atrás determinadas posiciones, como la vía unilateral, que la está dejando de lado”.
Estas declaraciones contrastan con las conclusiones de ERC en su Conferencia Nacional de 2018 en las que se aprobó que “no renuncian a ninguna vía democrática y pacífica” para hacer posible la República catalana, incluyendo en esas vías la salida de la unilateralidad.
Este fin de semana ERC celebra su congreso nacional de 2019, en el que se votará esa “ponencia estratégica” propuesta por la dirección, más predispuesta al diálogo con los poderes del estado que a salirse de la órbita constitucional recurriendo a la vía de la declaración unilateral de independencia.
No les será fácil a los dirigentes de ERC convencer a las bases de que hay que buscar la independencia por otros caminos, pero esta es la única manera de ganar tiempo a la espera de un mayor respaldo popular de la población catalana que en este momento hace inviable la independencia.
De esta manera a Pedro Sánchez le será más fácil justificar el apoyo de ERC en su investidura.