Baltasar Garzón, exjuez expulsado de la carrera judicial por prevaricador, se ha posicionado a favor de los políticos catalanes presos y ha cargado severamente contra Manuel Marchena, el presidente de la sala del Tribunal Supremo que les juzga.
El impulsor junto a Gaspar Llamazares de la plataforma 'Actúa' ha salido en tromba contra el magistrado, poniendo incluso en duda la manera con la que está dirigiendo la sala y poniéndose de lado de los catalanistas procesados.
"Quizá está interactuando demasiado tratando de reconducir a unos límites" las declaraciones de los testigos en el juicio que, en su opinión, "en algunos casos no serían exactamente los adecuados" y "pueden ser problemáticos" de cara a un recurso. (¡Qué gilipollas es el 'tontolaba' de Garzón! ¡¡Publica un tuit y luego lo borra acojonado!!).
En una entrevista concedida a 'Europa Press' al hilo del lanzamiento de su último libro, 'No a la impunidad. Jurisdicción universal, la última esperanza de las víctimas', Garzón se ha referido así a decisiones que ha ido tomando Marchena.
"Limitar las declaraciones de los testigos o la posibilidad de que las defensas los interroguen una vez que un testigo, sea cualquiera la parte que lo propuso, ya forma parte del acervo procesal, no creo que sea una buena medida, sobre todo de cara a ulteriores reclamaciones o recursos".
"Todo lo que sea dar pábulo a que ha habido limitaciones en el ejercicio del derecho de defensa puede ser problemático".
Baltasar Garzón y el 'procés'
Para reforzar su tesitura y su óptica en torno al juicio contra 'el procés', Garzón también ha criticado con dureza la réplica judicial a la declaración unilateral de independencia. (La trama Gürtel vuelve a pasarle factura al ex magistrado Baltasar Garzón).
"La judicialización del 'procés' ha sido un error y no tenía por qué haberse producido" y si bien esto "no quiere decir que no haya hechos delictivos que perseguir", él no cree que se hayan dado ni los de rebelión ni los de sedición que sostienen las acusaciones y cree que se comprobará "al final del camino".
"La torpeza política de algunos y el cinismo de otros ha producido esta situación y judicializarlo fue desde mi punto de vista, el peor error que se produjo. Quien tomase esa decisión no creo que imaginase las consecuencias que se iban a producir y las interpretaciones jurídicas que se están haciendo sobre la violencia va a ser muy difícil que se consoliden. Cuando una cosa cuesta tanto trabajo explicarla y comprenderla sin entrañas, es que no está bien".
Al fin y al cabo, ha asegurado que la Justicia en España es independiente -"lo cual no quiere decir que no haya jueces dependientes, como hay malos médicos o malos arquitectos"-, y que "no es verdad que haya politización", pero "judicializar ese hecho en toda su extensión" le parece erróneo y mantener al grueso de los acusados en prisión provisional "carente de justificación jurídica".
Además, ha opinado que todos los problemas que aún están sobre la mesa en torno a este tema, van a volver a ver la luz tras la convocatoria electoral. (¡Garzón se vuelve 'podemita' y 'amenaza' con colarse en la lista de Carmena!).
"El Parlamento Europeo se va a pronunciar, las instituciones europeas se tienen que pronunciar, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea probablemente también va a tener que pronunciarse y el Tribunal de Estrasburgo seguro que también. Hemos generalizado un problema que nunca debería haber trascendido las fronteras españolas".