Los gobernantes independentistas que ostentan la responsabilidad de representar a todos los catalanes desde las instituciones despreciaron a los trabajadores de la SEAT con su boicot a la reciente visita del Rey Felipe VI y Pedro Sánchez a las instalaciones de Volkswagen en Martorell. Al menos, así se sienten ellos: menospreciados.
Los trabajadores de la SEAT han asistido asombrados al vodevil montado por sus gobernantes con la visita del Rey para mostrar su apoyo y el del estado a nuevas inversiones en la planta de Martorell.
Se entiende que tanto trabajadores como la dirección de la empresa lamenten el comportamiento de unos gobernantes que han puesto en peligro la puesta en marcha de la nueva fábrica de baterías eléctricas con su actitud desafiante contra la Monarquía y el Estado.
"El presidente de SEAT, enfadado con las "gilipolleces" del Govern"
Lo ha verbalizado en la Cadena SER Matías Carnero, líder de UGT y presidente del comité de empresa de SEAT: “no es un plante al Rey de España o al presidente del Gobierno. Es un plante a la industria de Cataluña, es un plante a los trabajadores y un plante a las inversiones que vamos a tener y de los que se va a beneficiar gran parte de Cataluña. Creo que el gobierno de Cataluña debería haber estado para trasladar el apoyo a la industria catalana”. Carnero expresa el sentir generalizado de los trabajadores de la SEAT.
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Carnero también ha contestado a un tuit colgado por el conseller Calvet tratando de justificar la ausencia del Govern diciendo que ellos hablaban de forma discreta con la dirección de la empresa: “estas gilipolleces en estos momentos no se las cree nadie. Hay que ser más serios, ahora cualquier cosa vale. No hay motivo ninguno. Hubo preocupación, hablé con el presidente de Seat al acabar el acto y estaban muy enfadados“.
Y los trabajadores están preocupados, conscientes de que la paciencia tiene un límite y la dirección de SEAT puede plantearse (ya se lo ha planteado) si Cataluña es el mejor escenario para producir coches dentro de un clima de tranquilidad que no altere su actividad normal.
SEAT invertirá en su planta de Martorell 5.000 millones de euros lo que permitirá crear más de 10.000 empleos directos e indirectos. Y con eso no se juega. Es la opinión de trabajadores y de la patronal. La Generalitat les ha unido para denunciar su temeraria acción de gobierno.
Su grado de irresponsabilidad en este caso ha sido tan desproporcionado que produce pánico pensar lo que puedan llegar a hacer en el futuro como irresponsables gobernantes de casi 8 millones de personas que pueden ser conducidas al abismo.