El primer tiempo del Real Madrid ante el Eibar fue infumable. Si en Mestalla el equipo hizo una ‘cacicada’, en el Bernabéu se intentó superar. Un rival que ganó 3-0 en la primera vuelta y que tenía que hacer sacar el orgullo de los futbolistas.
Uno de los jugadores artífices de esa ‘cacicada’ fue Marco Asensio. Un jugador estéril en el primer tiempo y que irritó a muchos. Pase atrás y lejos de tirar del carro en todas las jugadas. En el segundo tiempo, sin embargo, algo cambió…
Versión apagada en el primer tiempo
Zidane le pegó un repaso a los puntos débiles y acomodó a Marco Asensio en la banda derecha. Por allí, el balear se encontró con su mejor versión en el terreno de juego. La versión apagada de Asensio se revolucionó en un jugador vertical y de mordiente, el jugador que quiere ver el madridismo, para remontar en el segundo tiempo.
Clave para remontar al Eibar
Marco, junto a Benzema, se asoció con el francés y fue clave para remontar el encuentro. Por la banda derecha, en ese cambio con Bale, utilizó su zurda y se la puso a la testa de Benzema (de forma precisa) para marcar el empate. Luego se remontó, con un centro de Kroos, pero Asensio apareció en todas las jugadas.
Asensio por la derecha
Asensio tiene hueco por la derecha. Salvo que Zidane quiera meter a Hazard por la derecha y a Vinicius por la izquierda, Asensio formaría el tridente por el lado diestro con Eden y Karim. Es el hueco del ataque que tiene el entrenador madridista en mente para Asensio de cara a la próxima temporada. (El nuevo rol de Marco Asensio en el Real Madrid de Vinicius y Hazard).