La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, quiere retrasar todo lo posible la reforma del delito de sedición, que beneficiará de forma clara a los independentistas catalanes que quisieron romper España en el año 2017 y tiene un plan para conseguirlo.
Arrimadas ha insistido en la idea de que el Partido Popular presente una moción de censura al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con el objetivo de demorar la tramitación parlamentaria de la derogación del delito de sedición y en ese caso «a Sánchez no le salen las cuentas» porque la iniciativa se debatiría en otro periodo de sesiones, ya en 2023, cerca de las elecciones municipales.
"Si se atreve a hacer esta infamia al menos que lo pague en las urnas, donde más le duele, en los votos, que no le interesa otra cosa", ha dicho la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, que está muy indignada con lo que quiere hacer el socialista Pedro Sánchez con el delito de sedición.
Inés Arrimadas ha hecho estas afirmaciones en el acto que ha protagonizado su partido en la presentación de algunas candidaturas andaluzas de su partido a las elecciones municipales de mayo de 2023. Eso sí, ha dejado claro que necesita la ayuda del Partido Popular para llevar a cabo su plan.
La dirigente de la formación naranja ha definido a Pedro Sánchez como "la persona más sin escrúpulos que hay en este país" porque "indulta" a los independentistas catalanes y de igual forma propicia que tengan "un Código Penal fetén para la próxima vez que quieran dar otro golpe de Estado".
Arrimadas ha trazado ejemplos paralelos para proyectar de forma gráfica la actitud que ha adoptado Sánchez ante el independentismo, por lo que se ha preguntado de forma retórica: "¿Os imagináis negociar la política de prevención de incendios con pirómanos o la política de seguridad en el metro con la Asociación de Carteristas?".
Un bofetón épico a Sánchez
"Eso es lo está haciendo Pedro Sánchez: negociar con quienes les están diciendo a la cara que van a dar un golpe de Estado", ha sentenciado Inés Arrimadas, que está dispuesta a todo con tal de frenar en seco los planes que tiene Pedro Sánchez y sus socios de Gobierno.
El problema es que el Partido Popular no se ha pronunciado al respecto y todo apunta a que no presentarán la moción de censura ya que no saldrá adelante. Eso sí, el hecho de que la reforma se acercase a las elecciones municiales podría hacer que Sánchez se lo pensara dos veces para no dejar al PSOE en una situación crítica.