Carles Puigdemont ya no oculta que su único interés, y su única ocupación en los últimos meses, ha sido enzarzarse en una pelea judicial contra España, buscando el apoyo de la Justicia europea contra la española en su huída y posterior euroorden de captura.
Una ocupación que no está provocando más que dolores de cabeza al ex president fugado de Waterloo, que observa cómo, a pesar de ser actualmente libre de moverse por prácticamente la totalidad del territorio europeo, el Tribunal General de la UE sigue estudiando las condiciones de su euroorden de captura, en respuesta a la cuestión prejudicial presentada por el juez del Tribunal Supremo, Pablo Llarena.
Complicada situación judicial la del independentista y demás fugados que ha sido ahora utilizada por Puigdemont para cargar contra la democracia española, a través de una columna de opinión en el diario francés 'le Monde', donde ha criticado que Europa no se posicione a favor de Cataluña por miedo a romper a uno de sus países miembros.
"Los 27 guardan silencio ante Madrid con el pretexto de que tomar una posición sobre Cataluña corre el riesgo de resquebrajar España" señala el independentista.
Adoctrinados, pero ignorantes: el fracaso escolar se dispara en Cataluña por culpa de la inmersión
Un silencio de la Unión Europea que, para Puigdemont, es el responsable de que Oriol Junqueras, acusado y condenado por el procés secesionista promovido por Puigdemont,ya no sea "eurodiputado a causa de laJusticia española".
"La gravedad de estos ataques a los principios fundamentales de la democracia nos concierne a todos los europeos, ciudadanos corrientes y funcionarios electos nacionales y europeos, aferrados a los valores y principios, consagrados en los tratados europeos y en las constituciones nacionales" ha criticado el fugado,a pesar de haber sido él mismo el que decidió romper con la Constitución española tiempo atrás.
Compara España con Polonia
Del mismo modo, en el mismo artículo, Puigdemont no duda en criticar que, mientras que la Unión Europea ha determinado que la cuestión del independentismo catalán es una cuestión nacional interna de España, sin pronunciarse así a favor o en contra del procés, los paises miembros sí se hayan pronunciado sobre la decisión del gobierno de Polonia de atacar los derechos de los LGTBI.
Ada Colau es un imán para los delincuentes y un peligro público: los números no engañan
"Cuando el gobierno polaco ataca los derechos de las personas LGTBI, ¿alguien se atrevería a decir que es un asunto puramente polaco?" lamenta el fugado de Waterloo "Pero cuando el Gobierno y Justicia se centraron en los funcionarios electos catalanes [...] se proclama que es solo un asunto puramente español".
Palabras con las que Pugidemont demuestra, no sólo su poco interés por la política, más allá de la que afecta directamente a su persona, sino también su intención de desprestigiar y cuestionar a cualquier institución, nacional o internacional, que no defienda su ideología y sus intereses frente a España, llegando a comparar los derechos humanos del colectivo LGTBI en Polonia con la cuestión judicial de los fugados de la Justicia por querer romper un país.