Este sábado por la noche, coincidiendo con la celebración de Halloween, un cura ortodoxo resultaba herido de gravedad en un templo de la ciudad francesa de Lyon.
Según la información sobre el suceso, el cura habría sido herido por una bala disparada con un fusil con el cañón recortado, habiéndose dado su agresor a la fuga después de disparar.
A pesar de que aún no se conocen los motivos de este suceso, muchos ya lo han relacionado con los atentados que Francia ha vivido estos días, siendo el tercer atentado vivido estas semanas en el país vecino, y el segundo ocurrido en un espacio religioso.
Y es que este jueves, un yihadista asesinaba a tres personas en Niza, junto a la basilica de Nuestra Señora de la Asunción, mientras gritaba 'Alá es grande'.
Un atentado muy similar al que acabó con la vida de Samuel Paty, un profesor que fue decapitado al salir de su colegio por un islamista checheno, que acusó a su víctima de haber enseñado caricaturas de Mahoma en sus clases.
Estos sucesos coinciden con el quinto aniversario de los atentados contra el Charlie Hebdó y contra el teatro Bataclán, que acabaron con la vida de decenas de personas, y provocando nuevamente el terror en las calles francesas.
Algo ante lo que ya se ha pronunciado el dirigente de la nación, Emmanuel Macron, que ha movilizado a 4.000 nuevos soldados en la 'Operación Centinela', que ya cuenta con 7.000 efectivos en las calles para "proteger los lugares de culto".
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"En Francia, no hay mas que una comunidad, la comunidad nacional" ha asegurado "Quiero decir a todos mis conciudadanos, de cualquier religión, sean creyentes o no, que debemos unirnos y no ceder un ápice al espíritu de la división".
Los islamistas, unidos contra Francia
Estas medidas impulsadas por Macron, así como la defensa de la 'libertad de expresión' ante la publicación de caricaturas referentes al islamismo, han molestado a los máximos dirigentes de los países y vertientes islamistas.
Así pues, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha llegado a cuestionar la salud mental de Macron, proponiendo un boicot a los productos de origen francés.
Una posición que ha sido apoyada por otros dirigentes, como el primer ministro de Pakistán o el secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán, que han acusado al galo de "ofender al Islam".
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Tal es así, que la rama suní como la chií del Islam se han unido contra Francia y su 'libertad de expresión'. Incluso algunos jeques árabes no han dudado en utilizar las redes sociales para hacer pública su crítica a posición de Francia con respecto al Islam, llegando a amenazar con graves "consecuencias" de continuar así.
"Si no hay una disculpa oficial a todos los países musulmanes, recomendaremos las acciones ofensivas del Mensajero de Dios, así que asuman las consecuencias" ha asegurado el jeque Abdullah Bin Nasser Al Thani, propietario del Málaga C.F.