El Parlament le tiende una emboscada al juez que juzgó a Torra

Los diputados separatistas han intentado 'comerse' al juez Barrientos en su comparecencia en el Parlament para comentar la memoria de 2018 del TSJC.

22 de Noviembre de 2019
El Parlament le tiende una emboscada al juez que juzgó a Torra
El Parlament le tiende una emboscada al juez que juzgó a Torra

Seguramente el juez Jesús María Barrientos estaba avisado y no le pilló por sorpresa. Como presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña debía acudir a la cita con el Parlament para presentar la Memoria del TSJC del año 2018, pero en realidad fue allí para ser interpelado por la Comisión de Justicia por la situación de los presos políticos. Le tendieron una emboscada.

Se da la circunstancia de que el juez Barrientos es el mismo que juzgó el lunes por desobediencia al descontrolado Quim Torra, y a quien Gonzalo Boye, su abogado defensor, riñó por referirse a Torra como "señor" y no como "Muy Honorable Presidente de la Generalitat".  Barrientos es el juez a quien Torra recusó por entender que no sería capaz de juzgarle con imparcialidad y el que le inhabilitará en la sentencia que tiene que dictar en los próximos días.

Le tenían ganas al juez Barrientos

Y le tenían ganas en la bancada independentista. El juez acudía para presentar la Memoria del TSJC del año 2018 y extenderse sobre la situación y estado de los juzgados catalanes, pero eso era lo que menos interesaba a los diputados independentistas, que se relamían ante la posibilidad de hincarle el diente a alguien tan significado dentro del escalafón de la justicia española.

Los diputados de JxCat, ERC y CUP tenían cuentas pendientes con el juez. le han acorralado jugando en campo propio y con el árbitro a favor, le han interpelado por los "presos políticos" y han puesto énfasis en esta expresión, que han repetido hasta la saciedad con retintín. "Nos gusta que hoy no se marche", le ha dicho el diputado de la CUP Vidal Aragonés, que le ha preguntado si irse del acto en el Icab es compatible con el código ético de la carrera judicial, recordándole su decisión de levantarse y abandonar la sala en un acto en el Col·legi d'Advocats presidido por Roger Torrent cuando éste se refirió a los presos golpistas como "presos políticos". Barrientos ha insistido en que no iba a hacer valoraciones ni entrar en polémicas y que el motivo de su presencia allí era el de presentar la Memoria de 2018.

¡Inaudito! El juez, amenazado por incurrir en delito de desobediencia al Parlament

Barrientos se ha limitado a responder que "yo, lamentando y defraudando su expectativa, creo que no es el momento ni mi comparecencia aquí lo es para explicar o realizar consideraciones sobre mis resoluciones o mi comportamiento en el plano institucional. Las conductas son las que son y tenemos que responder cada uno ante su conciencia".

Y el espíritu revanchista ha salido a flote cuando Vidal Aragonés ha amenazado a Barrientos porque, de acuerdo con el reglamento del Parlament, debía responder en cumplimiento del artículo 59.2 del Reglamento del Parlament y que los comparecientes, sean quienes sean, tienen que responder a las preguntas de los grupos. Y le ha alertado de que eso podría hacerlo incurrir en un delito de desobediencia. El juez juzgado (y con severidad) por quienes disfrutan saltándose la ley. Ver para creer.

"La condición de mi comparecencia aquí no me obliga a nada más", ha zanjado con valentía Barrientos sin dejarse achantar por las bravatas de la CUP.

El diputado de JxCat Eusebi Campdepadrós también ha preguntado a Barrientos sobre informes de entidades de derechos humanos acerca del juicio al proceso soberanista, entre ellos el de Amnistía Internacional, y le ha planteado la "misma preocupación" por la interpretación del delito de sedición.

Momentos de tensión en el Parlament

Ha sido entonces cuando la vicepresidenta de la Comisión, Carmen de Rivera (Cs), ha interrumpido la intervención del diputado de JxCat considerando que desbordaba la temática de la comparecencia --la presentación de la memoria--, a lo que Campdepadrós ha asegurado que dejaba inconclusa su intervención y dos diputadas de su partido se han marchado en señal de protesta en una reacción infantil y poco digna del cargo que ostentan. Así se produjo el momento de tensión:

"Le pido que se atenga a la cuestión que estamos tratando", le ha dicho la vicepresidenta al diputado separatista, que ha respondido: "expresar la opinión sobre estas resoluciones es totalmente pertinente y le agradecería que me descontara el tiempo que me ha cortado".

Y Carmen de Rivera le ha interrumpido de nuevo: "Lo siento, señor Campdepadrós, la discusión sobre el delito de sedición excede muchísimo del objeto que estamos tratando. Le agradeceré que hable del tema que nos ocupa...". A lo que el independista volvió a replicar: 

"Vicepresidenta, creía que el tema que nos ocupaba es la justicia. Si usted no ne permite continuar haciendo uso de la palabra, dejaré aquí mi intervención y el resto de miembros de JxCat abandonarán la comisión. Yo permaneceré por respeto al compareciente".

Le recuerdan al juez que sólo el Parlament puede nombrar al presidente de la Generalitat

El diputado de ERC Jordi Orobitg también ha criticado la existencia de "presos políticos", ha recordado a Barrientos que el lunes juzgó al presidente de la Generalitat, Quim Torra, y que en democracia el Parlament es el único legitimado para nombrar presidentes, referiéndose a que una sentencia suya inhabilitando a Torra significaría un cambio en la presidencia de la Generalitat.

También ha pedido que valorara la aplicación del artículo 155 de la Constitución y le ha reclamado empatía con las personas que creen que "están procesadas por motivos ideológicos". Una encerrona en toda regla.

Barrientos no ha entrado al trapo en ningun momento, aunque sí ha dejado clara su postura acerca de que la intervención de la autonomía de Cataluña "no afectó en absoluto" al régimen ordinario de la actividad de los jueces y que las aportaciones del Ministerio de Justicia fueron nulas, en sus palabras.

Entre los diputados republicanos presentes en la Comisión estaba el también exnúmero dos de Oriol Junqueras, Josep Maria Jové, que está siendo investigado por el TSJC por presuntos delitos de malversación, revelación de secretos y desobediencia grave por su implicación en el proceso soberanista y la organización del 1-O.