El Parlament de Cataluña ha renegado de Jordi Pujol, que hace unos días cumplió 90 años, y le ha reclamado los 885.651 euros que defraudó por la fortuna oculta en Andorra.
Todas las fuerzas políticas de Cataluña han condenado las "conductas ilegales y corruptas" de "ocultación de patrimonio" y "defraudación de cuotas tributarias" que se le atribuyen al ex presidente catalán. (Cuando Jordi Pujol no era independentista: ¡¡Así defendía la permanencia de Cataluña en España!!)
Es la primera vez desde 2014, año en el que Jordi Pujol confesó el escándalo, que todos los partidos políticos condenan de forma clara y contundente las prácticas corruptas del que fuera presidente de Cataluña.
Se ha aprobado un texto, que ha contado con el apoyo de todos sin excepción, en el que se condena el fraude fiscal que pueda cometer cualquier contribuyente, “en especial por parte de personas que ostentan o han ostentado importantes responsabilidades políticas”.
Dicho texto recoge que es "conveniente y necesario" que Pujol “regularice de manera inmediata y voluntaria las cantidades pendientes con la Agencia Tributaria que habría defraudado fiscalmente”.
La resolución, impulsada por Ciudadanos el pasado mes de febrero, insta al Govern a “adoptar todas las medidas necesarias en materia de transparencia para exigir a todos los expresidentes la presentación y publicación de sus declaraciones de bienes y actividades al inicio y al final de cada legislatura”. (Operación Blanqueo: TV3 se vuelca con la beatificación del corrupto Pujol)
La familia Pujol, imputada
Jordi Pujol, Marta Ferrusola (mujer del ex presidente catalán) y los siete hijos del matrimonio están imputados por un supuesto delito fiscal desde el mes de enero de 2017.
La Agencia Tributaria, a través de un informe, determinó que hubo “un ingreso en efectivo sin justificar” con el equivalente a 1,84 millones de euros en una cuenta abierta por la familia en Andorra en 2000 cuyo “titular real” era el ex presidente.
Esta teoría demontaría la confesión de Jordi Pujol, que explicó que el dinero que ocultó al fisco era de un legado de su padre y los beneficiarios eran su esposa y sus hijos.
La familia ha negado en todo momento la versión de la Agencia Tributaria y ha atribuido el dinero a una cuenta de la que es titular Jordi Pujol Ferrusola (el hermano mayor).