José Rosello es el padre de Julen, el niño de dos años que cayó a un pozo de más de 100 metros de profundidad en el municipio malagueño de Totalán.
El padre del pequeño vive con angustia y espera que los grupos de rescate encuentren a su hijo con vida tras varios días sin tener noticias de él. (La tragedia se ceba con la familia del pequeño Yulen)
Ahora, Rosello ha concedido una entrevista a Diario Sur en la que ha hablado de como ocurrió y de las dudas de algunos expertos sobre la caída del pequeño.
"Mi hijo está aquí, que nadie lo ponga en duda. Ojalá fuese imposible que esté en el pozo, como he oído", ha señalado el padre de Julen. (Toda la noche buscando al niño caído a un pozo de 110 metros)
Rosello ha explicado como fue el momento en el que Julen cayó al pozo. "Mi prima, que estaba más cerca, salió tras él y empezó a gritar '¡el niño, el niño!' temiendo que se tropezara. Ella vio cómo Julen caía de pie por el agujero, con los brazos hacia arriba".
Tras caer al pozo, José Rosello ha asegurado que escuchó los llantos de su hijo. Él intentó tranquilizarle y que no se sintiese angustiado ni nervioso. (Encuentran una bolsa de chuches del niño que cayó al pozo de Málaga)
Un lamento desesperado
"Muchos tuits de apoyo, muchos votos, pero medios ninguno. ¿Sabe usted lo que es llevar aquí 30 horas esperando a que saquen a tu hijo de un pozo?", ha explicado.
En los primeros minutos tras el suceso, el padre de Julen pidió a su prima y a su novio que buscaran ayuda aunque fueron unos senderistas los que llamaron al 112.