El Ayuntamiento de Palafrugell ha obligado a cinco monjas octogenarias a desinfectar la residencia de ancianos del municipio catalán durante la crisis del coronavirus.
La directora del centro de mayores pidió a ERC, partido político que gobierna en Palafrugell, que avisasen a la Unidad Militar de Emergencias (UME) para desinfectar el edificio. (Ejército: ¡Qué bueno que viniste!)
El consistorio envió a los servicios municipales, que solo estuvieron un día en el interior del centro. De los exteriores de la residencia se hizo cargo una empresa privada.
Las labores de desinfección fueron escasas por lo que las cinco monjas citadas anteriormente (todas ellas de unos 80 años) tuvieron que terminar los trabajos de limpieza.
El Hogar Nuestra Señora de Montserrat cuenta con un total de 65 ancianos en sus instalaciones. Es un centro de mayores privado que está regido por una orden religiosa.
No es la única residencia que se ha visto afectada por el odio de los partidos políticos independentistas al Ejército español, que se ha desplazado por toda España para ayudar en tareas de desinfección, limpieza y montaje de hospitales de campaña.
El centro Palafrugell Gent Gran, que depende del ayuntamiento de la localidad gerundense, tampoco pudo contar con la ayuda de la Unidad Militar de Emergencias (UME).
En esta residencia han fallecido un total de 30 personas mientras que otras 32 han dado positivo por coronavirus. Estas cifras no han servido para que ERC deje a un lado su odio al Ejército. (El Ejército es "non grato" en Cataluña y País Vasco: ¡No lo quieren ni para ayudar!)
El independentismo, por encima de todo
Cataluña ha sido la única comunidad autónoma española que ha puesto problemas a los efectivos de la Unidad Militar de Emergencias durante la crisis del coronavirus.
En un momento tan delicado, muchos municipios catalanes han preferido poner por delante el independentismo y su odio hacia España antes que dejar las diferencias a un lado y centrarse en salvar vidas.