Que nadie se lleve a engaño. Maurici Lucena, el presidente de Aena que ha compaginado su cargo público con la campaña electoral, cree firmemente en el referéndum y así lo ha expresado en el pasado. Lucena es el número dos de Illa y en su hipotético Govern se encargaría de las cuestiones económicas. De él ha presumido Illa durante la campaña, aunque su pasado no guarda relación con la moto que vende el exministro de Sanidad, a no ser que su posición frente al independentismo no sea otra mentira más a colar al electorado.
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Lucena, que va de vicepresidente económico en la candidatura de Illa, fue diputado y portavoz del grupo Socialista en el Parlament entre 2012 y 2015. En esa época de actividad política, Lucena era un ferviente defensor del referéndum catalán, algo que supuestamente choca de frente con las propósitos de Salvador Illa. O eso dice al menos en campaña.
A favor de un referéndum de independencia vinculante
Así respiraba el número dos de Illa en esa época: "El PSC apoya inequívocamente la celebración de una consulta o referéndum que materialice el legítimo derecho a decidir que pensamos que tiene Cataluña para decidir su futuro político y colectivo. Y eso quiere decir que querríamos que se celebrara una consulta o referéndum que tuviera una pregunta clara del estilo de: ¿quieren los catalanes independizarse de España?". Más claro, el agua.
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Y seguía: "Y, además, esta pregunta, aparte de ser tan clara, fuera vinculante para las dos partes, es decir, para el resto de España y para Cataluña. De manera que cuando se produjera la consulta o el referéndum, en función de la opción que saliera, las dos partes se quedaran comprometidas a respetar la voluntad de Cataluña. Esta es la opción que inequívocamente apoya al PSC". Firmado, Maurici Lucena.
"No nos engañemos"
En esos tiempos, Illa era el coordinador del grupo municipal del PSC en el ayuntamiento de Barcelona.
Lo decía Lucena: "no nos engañemos". "La salida a esta situación ha de ser a través de una consulta a Cataluña y a España [sic], de acuerdo con la ley y con el apoyo del Gobierno central. No nos engañemos: en un momento u otro, deberá haber esa consulta. (…) estamos teniendo problemas con algunos dirigentes del PSOE, pero confiamos en hacer pedagogía y que, al final, acaben asimilando nuestras tesis. De momento, ya es un paso adelante que, después de 30 años, acepten modificar la Constitución (…) es irrenunciable, aunque luego en un llamamiento a las urnas pidamos el no a la independencia”.
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En un momento u otro deberá haber consulta. El equipo de Illa lo tiene claro. Se supone que Illa también. Y por extensión Pedro Sánchez. Parece claro que la posición del PSC no está tan alejada como nos quieren hacer creer de los partidos independentistas. Todos persiguen lo mismo.